¿Por qué algunas personas insisten en beber licor cuando saben que van a conducir después?, ¿por qué lo hacen, si nos lo han repetido hasta la saciedad: a medida que aumenta la concentración de alcohol en nuestra sangre crece también el riesgo de accidentes fatales? ¿Será que creemos que nada malo nos pasará nunca? ¿Será que olvidamos que somos mortales, que nuestros seres amados y el resto de seres humanos que andan en la carretera también lo son? Lea aquí: No: no manejas “mejor” cuando tomas, es un absurdo y te contamos por qué
De acuerdo con la Asociación Iberoamericana de Víctimas Contra la Violencia Vial, en Colombia, entre 2001 y 2021, hubo 1 millón 500 mil personas (aproximadamente) involucradas en accidentes de tránsito donde medió el licor: el 12% de ellos murieron, es decir, 47 mil víctimas anuales en promedio, son el resultado de estos incidentes viales. Ninguna de ellas se imaginó protagonizar una noticia de sucesos, ¿verdad?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho: “El consumo de alcohol está relacionado con toda una serie de problemas de salud, entre ellos trastornos mentales y del comportamiento, en particular la dependencia del alcohol; graves enfermedades no transmisibles, como la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares; y lesiones y muertes por violencia y accidentes de tránsito”.
Y es que, en promedio, según la OMS, 85.032 muertes anuales se atribuyeron exclusivamente al consumo de bebidas alcohólicas entre 2013 y 2015. En su mayoría, estas muertes (64,9%) correspondieron a personas menores de 60 años y se debieron principalmente a hepatopatías (63,9%) y a trastornos neuropsiquiátricos (27,4%), como la dependencia del alcohol.
Más consecuencias
Causar/padecer un accidente de tránsito -fatal o no- es la primera y más terrible consecuencia de conducir bajo los efectos del alcohol, pero no la única.
Según el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte de Cartagena (Datt), hay una serie de sanciones y multas para los conductores que incurran en la peligrosa conducta de conducir alicorados y están consagradas en el Código Nacional de Tránsito. Le puede interesar: Estas son las terribles consecuencias del licor en la salud de los niños
Grado 0. Inmovilizarán tu vehículo por un día, te suspenderán la licencia de conducción por un año y te impondrán un comparendo por 90 SDLV, unos $2.999.970.
Grado 1. Inmovilización del vehículo por 3 días, suspensión de la licencia de conducción por 3 años y una multa de 180 SDLV, unos $5.999.940.
Grado 2. Inmovilización del vehículo por 5 días, multas por 360 SDLV, unos $11.999.890, y suspensión de la licencia de conducción por 5 años. Lea: Las consecuencias que trae el consumo excesivo de licor
Grado 3. Inmovilización del vehículo 10 días, multa de 720 SDLV, es decir, $23.999.760, suspensión de la licencia por 10 años.
Es importante saber también que negarse a realizarse la prueba de alcoholemia es sancionado con 1.440 SDLV, es decir $47.999.000, y la cancelación de la licencia de conducción.