Todos tenemos un amigo que vive con la nariz “tapada”, y si no lo tienes, ¡probablemente eres tú!
Seguramente habías escuchado que, médicamente, esta molestia se llama congestión nasal, ¿pero sabes por qué ocurre?
De acuerdo con expertos de la Clínica Mayo, de EE. UU., “se produce cuando los tejidos nasales y adyacentes y los vasos sanguíneos se inflaman con el exceso de líquido y causan una sensación de ‘congestión’. La congestión nasal puede o no estar acompañada de una secreción nasal o ‘moqueo’”. Lee aquí: ¿Qué sirve para la rinitis?
Puede tratarse de una molestia sencilla para los niños más grandes y para los adultos, pero para los niños pequeños, la congestión nasal puede convertirse en un asunto grave: altera su sueño y en los bebés, puede implicar dificultades para alimentarse.
¿Por qué ocurre?
Esta congestión puede ser causada por algo que irrita o inflama los tejidos de la nariz.
La Clínica Mayo explica en su página que “las infecciones, como resfriados, gripe o sinusitis, y las alergias son causas frecuentes de congestión nasal y secreción nasal. A veces, una nariz congestionada y que moquea puede ser causada por irritantes como el humo del tabaco y el escape de los automóviles. Esta afección se conoce como rinitis no alérgica o rinitis vasomotora”.
¿Cuándo ir al médico?
Pide ayuda médica si:
-Tus síntomas duran más de 10 días.
-Tienes fiebre alta.
-Las secreciones nasales son amarillas y verdes, y están acompañadas por dolor sinusal o fiebre. Es posible que esto sea una señal de infección bacteriana.
-Tienes sangre en tus secreciones nasales o secreciones transparentes persistentes después de sufrir una lesión en la cabeza. Lee además: 6 mitos y realidades de la rinitis
En el caso de los niños:
-El niño tiene menos de 2 meses y tiene fiebre.
-El moqueo o congestión nasal de tu bebé causa problemas para mamar o respirar.
Prueba estas medidas simples para aliviar los síntomas:
• Intenta oler y tragar o sonarte suavemente la nariz.
• Evita los desencadenantes conocidos de alergias.
• Si tu secreción nasal es una secreción acuosa y persistente, especialmente si también estás estornudando y tienes ojos llorosos o con picazón, tus síntomas pueden estar relacionados con alergias, y un antihistamínico de venta libre puede ayudar. Asegúrate de seguir las instrucciones de las etiquetas con exactitud.
• Si tienes un bebé o un niño pequeño con estos síntomas, usa una jeringa de succión de goma suave para quitar las secreciones cuidadosamente.
• Bebe mucha agua; el líquido ayuda a diluir las secreciones nasales.
• Prueba el uso de atomizadores o lavados nasales con solución salina.