Para cualquier hombre, tener un gran, excelente, magnífico e increíble desempeño sexual es fundamental... bueno, para las mujeres también, pero, al menos nosotras no tenemos que mantener de pie y firme a ningún “amiguito”. Quizá esa “presión” es el motor tras una tendencia que preocupa a expertos: cada vez más hombres jóvenes y sanos están tomando medicamentos como para mejorar en la cama. No lo necesitan, pero se arriesgan a padecer efectos secundarios con tal de ser recordados como sementales.

Fernando Rosero, médico de Salud sexual y Sexología clínica de la Universidad de Barcelona (España) y jefe del Servicio de Salud Sexual en la Clínica de Marly (Bogotá), explica: “Lastimosamente, sí, existe, es una realidad que cada vez más personas jóvenes están utilizando medicamentos para la erección sin que haya necesidad de utilizarlos. Básicamente, esta utilización se da cuando la sociedad nos ha puesto estándares que muchas veces son erróneos, respecto a unas metas que debemos cumplir para tener un buen performance o, en teoría, para ser sexualmente competentes”. Lea aquí: El colesterol malo desmorona tu erección
Para Rosero, un hombre sano que tiene la erección al 100% “no va a conseguir una erección por encima del 110%”, lo cual indica que estos medicamentos en realidad no van a “funcionar” o hacer una diferencia significativa en hombres jóvenes y sanos.
Práctica peligrosa
De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de los Estados Unidos (NIDDK, siglas en inglés), la disfunción eréctil “es un problema médico que impide poder tener o mantener una erección suficientemente firme para tener relaciones sexuales satisfactorias”. Según la Clínica Mayo, los especialistas suelen tratarla con medicamentos orales como Sildenafil (Viagra), vardenafil (Levitra, Staxyn), tadalafil (Cialis) y avanafil (Stendra), pero, eso sí, después de conocer a fondo las condiciones del paciente para minimizar las probabilidades de efectos secundarios.
Los efectos secundarios suelen ser poco comunes, pero pueden incluir: enrojecimiento, dolor de cabeza, indigestión, cambios visuales, como tinte azul en la visión, sensibilidad a la luz o visión borrosa; congestión nasal o con secreciones líquidas y dolor de espalda. Los más graves incluyen: pérdida de audición o pérdida de la visión, una erección que no desaparece por sí sola (priapismo) y que puede causar daños en el pene.
Respecto a los hombres jóvenes y sanos que se automedican: “Los peligros que acarrean estos medicamentos es que pueden producir efectos tanto generalizados como en el corazón, a nivel de la cabeza, como a otros síntomas o noveles. Estos síntomas se minimizan o no existen cuando es el médico quien prescribe la medicación y tiene en tiempo las características individuales de cada persona”, explica el doctor Rosero.
¿Cuándo consultar al médico si eres joven?
-Cuando tiene dificultades para mantener una erección.
-Cuando pierdes rápidamente la erección.
-Cuando no logras una buena erección.
-Cuando, en términos generales, no estás satisfecho con tus formas y desempeño sexual.
Dejarlos es lo más difícil
Como menciona el doctor Rosero: “Es importante tener en cuenta que estos pacientes sufren más tratando de quitar la medicación. ¿Qué quiero decir con esto?, que lastimosamente es más complicado para los médicos mostrarles la verdad de todo esto a los pacientes que se han acostumbrado a utilizar medicamentos sin necesidad”. Lea además: Alerta: estos son los síntomas de enfermedades propias de los hombres