El síndrome del túnel carpiano se da por la comprensión de los nervios que pasan a través de la muñeca. Algunos signos de alarma que podrían indicarle que está sufriendo de esta condición son: el adormecimiento de los dedos, dolor en las noches, hormigueo en las manos al despertar y pérdida de fuerza en las extremidades superiores.
Estos síntomas aparecen porque se inflaman los tendones, causando un estrechamiento del conducto nervioso. Además, suelen manifestarse por situaciones relacionadas con la postura de las manos durante las horas de sueño y los movimientos repetitivos que hacen parte del trabajo y de la cotidianidad. Este síndrome afecta de forma más fuerte a las personas con enfermedades metabólicas, diabetes y mujeres embarazadas.
El doctor Francisco José Camacho García, médico cirujano especialista en ortopedia y traumatología adscrito a Colsanitas, recomienda “hacer uso de herramientas que eviten el esfuerzo excesivo de las manos, como los son los destapadores, exprimidores, entre otros utensilios. También, es recomendable el cuidado de la postura pues, los movimientos de las manos pueden reflejarse en molestias de la zona cervical. Por último, pero no menos importante, es necesario hacer pausas activas, por lo menos dos veces al día, con ejercicios de estiramiento”.
Hay que tener en cuenta las alertas que puede presentar el cuerpo porque, si no se comienza a tratar a tiempo, las fibras de la mano comenzarán a deteriorarse y ninguna cirugía podrá recuperarlas. Es por esta razón que el doctor Camacho recomienda acudir a una visita médica en el momento en que se identifiquen los primeros síntomas o molestias. (Le puede interesar: Presentan el libro de la osteoartritis)
Para prevenir esta condición, durante las horas de sueño, por ejemplo, una muñequera nocturna puede evitar la compresión en el nervio mediano de la muñeca. Por su parte, en el día, es necesario que cualquier labor se realice con las condiciones ergonómicas adecuadas, así se encuentre en casa, teletrabajo, en oficina o haciendo actividades con movimientos repetitivos. Como lo indicaba el doctor Camacho, también es fundamental hacer pausas activas con estiramientos, por ello, a continuación, le explicamos algunos:
- Junte sus manos, en posición de oración y, manteniendo fijas las muñecas en un solo punto, empuje los dedos con la yema, aplicando fuerzas opuestas.
- Con una mano apriete con fuerza moderada la muñeca del brazo contrario y gire la mano sin soltarla.
- Una el dorso de sus manos (la parte contraria a la palma) y haga presión en sentido contrario. Diríjalas hacia el pecho tanto como pueda.
- Con la mano contraria, agarre los nudillos y parte de los dedos. Estírelos suavemente hacia abajo.
- Tome con una mano los cinco dedos de su extremidad contraria y estírelos hacia atrás. Realícelo en ambas manos.
Recuerde que estos ejercicios deben realizarse por mínimo 15 segundos, dos veces al día, para lograr buenos resultados y evitar afectaciones. ¿Te gustaría recibir en tu celular las noticias más importantes del día? Da clic aquí y escríbenos a Whatsapp.