Con el fin de poder apoyar a todos estos pacientes que se han visto afectados por el coronavirus, y los cuales necesitan la terapia de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO) para dejar reposar y recuperar sus pulmones, la Fundación Cardiovascular de Colombia (FCV), ha apoyado con más de 40 rescates y traslados de estas personas a través de la unidad de Transporte Aéreo Medicalizado (TAM), los cuales se han visto afectados por el COVID-19.
Leonardo Salazar Rojas, director del programa ECMO y Corazón Artificial de la Fundación Cardiovascular de Colombia, señaló que “dicha tecnología reemplaza artificialmente las funciones del pulmón y/o el corazón por un tiempo prudente para que los pacientes en estado crítico que no han respondido favorablemente a los tratamientos convencionales del coronavirus, puedan mejorar”.
Salazar señaló que en el avión medicalizado van especialistas de la Fundación, los equipos necesarios y el pulmón artificial al que conectan al paciente, mientras es trasladado a las instituciones donde recibirán el resto del tratamiento.
“Los pacientes son trasladados a nuestra clínica en Bucaramanga, donde están los especialistas que manejan esta terapia. Los traslados se hacen cada vez que un paciente lo requiera, pero el avión está disponible las 24 horas”, comentó el director del programa.
Al llegar a la clínica, al paciente lo espera un equipo multidisciplinario conformado por médicos, enfermeras, auxiliares y terapistas que trabajan para mantener estable a los pacientes y empezar rápidamente con la rehabilitación.
Este proceso, según conoció El Universal, inicia máximo 48 horas después del tratamiento para “evitar el desacondicionamiento físico y lograr la deambulación temprana”.

Funciona como un pulmón artificial. // Cortesía
Además de tener la capacidad de atender y trasladar pacientes que requieren ECMO, la unidad de Transporte Aéreo Medicalizado (TAM), disponible hace más de 10 años en la FCV, brinda servicios a personas en estado crítico que necesiten diferentes técnicas avanzadas.
El 16 de junio del 2020, la UCI ECMO atendió por primera vez a un paciente COVID-19. Desde entonces más de 100 personas afectadas por el SARS-CoV-2 han recibido en la FCV esta terapia, con la que se triplica la posibilidad de sobrevida de los casos más críticos (crece del 20 % al 60 %).
“Atendemos pacientes adultos, pediátricos y neonatales (con incubadora) con el apoyo de especialistas en cardiología, cirugía cardiovascular y neurocirugía, entre muchos más. Siempre estamos listos para llevar la calidad FCV al alcance de cualquier paciente que lo necesite”, sostiene Alejandro Luna Franco, gerente de Transporte Aéreo Medicalizado (TAM).
Esta es una alternativa para pacientes con fallas cardiopulmonares que tienen una probabilidad de muerte cercana al 90%.
En 2018, la FCV se convirtió en la primera institución médica en Colombia, y la segunda en Latinoamérica (tras la Clínica Las Condes en Chile) en recibir el reconocimiento como centro de excelencia en ECMO por parte de la Organización para el Soporte Vital Extracorpóreo (ELSO, por sus siglas en inglés), ente que reúne a los centros del mundo que emplean esta tecnología.