Donde hay VIH también hay fe, resistencia, motivos para vivir y para demostrar que accediendo a un tratamiento con antirretrovirales no hay nada que impida tener una vida larga, saludable y construir el futuro que se desea. Es el caso de Gloria Esther, quien no se autocondenó y actualmente es líder, activista, una luz de esperanza y extraordinario ejemplo para las personas contagiadas.
La vida de Gloria, afiliada a Coosalud EPS, cambió al escuchar las palabras del médico: “¿viniste sola?”, pero hoy, 15 años después, entiende que ese interrogante tiene respuesta: “No estoy sola, acompaño a personas en mi misma situación, no tengo sida y aprendí a vivir con VIH”.
A esta madre de dos hijos, trabajadora y entusiasta, la vida le dio un vuelco cuando a los más de tres años de vivir con su nueva pareja –quien la contagió- presentó algunos síntomas y decidió realizarse la prueba de VIH, que resultó positiva. “Derrumbada pensé que lo mejor era morir, pero me refugié en Dios y en la Fundación Esperanza por la Vida que me enseñó a aceptar, a convivir con la enfermedad y a servir a otros”.
Con su grupo comunitario Manos Unidas y a sus 65 años de edad, Gloria continúa con la misión de mejorar la calidad de vida de la población con VIH, en especial a las mujeres; luchando contra la violencia, el estigma, la discriminación y la feminización. Es directora de Manos Unidas; vocera del Atlántico de Recolvih, (Red Colombiana de personas que viven con VIH o sida); miembro del comité de Pastoral Social Inclusiva Frente a la Pandemia de VIH, trabaja en alianza con la Corporación Red Somos y es representante en las mesas de trabajo nacionales.
“Hago sensibilizaciones, dicto talleres, visito a recién diagnosticados y les digo que no es el final mundo, que siempre hay alguien que nos motiva a seguir adelante”.
Ella ama la vida y todo lo hace con pasión y ganas. Su clave para continuar en pie de lucha está en tomar los medicamentos para que la carga viral se vuelva indetectable y, por tanto, también intransmisible. “Mi compromiso está en cuidarme y cuidar del otro”.
Sabías que:
El VIH y sida no son lo mismo
El VIH, virus de la inmunodeficiencia humana, infecta y destruye las células del sistema inmunitario, produciendo un deterioro progresivo de las defensas del organismo. Cuando esto ocurre se origina el sida, síndrome de inmunodeficiencia adquirida, porque el sistema inmunitario ya no puede combatir las infecciones y otras enfermedades, por lo que se presentan infecciones y ciertos tipos de cánceres mortales.
El VIH y la tuberculosis (TB)
La TB sigue siendo la principal causa de muerte entre las personas que viven con el VIH y representa alrededor de una de cada tres muertes relacionadas con el sida. Fuente: ONUSIDA
Síntomas
La mayoría de las personas infectadas por el VIH, si no se tratan, empiezan a mostrar síntomas de sida a los ocho o diez años. Y se identifica con la base de ciertas infecciones.
Fase I: es asintomática y no se considera sida.
Fase II: produce candidiasis (infección producida por un tipo de hongo) e infecciones frecuentes del tracto respiratorio superior.
Fase III: incluye diarrea crónica sin explicación que persiste más de un mes, varias infecciones bacterianas y tuberculosis pulmonar.
Fase IV: incluye toxoplasmosis cerebral (infección causada por un parásito), candidiasis de esófago, tráquea o pulmones y sarcoma de Kaposi (tipo de cáncer) y se emplean como indicadores del sida.
Transmisión
1. Vía sexual, a través de la secreción de fluidos que se producen durante el acto sexual.
2. Vía sanguínea, al ponerse en contacto con la sangre de una persona infectada.
3. Vía vertical, cuando una madre seropositiva se lo transmite a su hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia.
El riesgo de contraer el VIH es:
26 veces mayor entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres.
29 veces mayor entre las personas que se inyectan drogas.
30 veces mayor para los/las trabajadores/as sexuales.
13 veces mayor para las personas transgénero.
Fuente: ONUSIDA
No es posible infectarse a través de:
Besos (no es transmisible por la saliva).
Abrazos y apretones de manos
Objetos personales o utensilios de un enfermo
Compartir baños o gimnasios
Compartir alimentos o bebidas
Picadura de mosquitos
Mito
Uno de los mitos es que el VIH se contagia cuando se reciben transfusiones sanguíneas. Resulta poco probable que esto suceda, ya que en los centros asistenciales primero se someten a rigurosos análisis todas las donaciones de sangre para evitar futuros contagios.
¿Es seguro mantener relaciones sexuales con una persona que vive con el VIH?
Tener sexo con una persona que vive con el VIH es seguro si el virus está totalmente suprimido por el tratamiento. El sexo también es seguro si el preservativo se utiliza adecuadamente o si la persona sigue un tratamiento de profilaxis preexposición (medicación, pruebas de laboratorio y servicios de asesoramiento) de acuerdo con las recomendaciones del médico tratante.

Diagnóstico
Las pruebas de sangre detectan la presencia de la infección.
Muchos pacientes que han sido diagnosticados con VIH no han llegado a contraer el sida porque son capaces de pasar años con el virus en su cuerpo sin llegar a un deterioro grave del sistema inmune que ponga en peligro su vida. De ahí la importancia de un diagnóstico oportuno, para luego ser sometido al debido tratamiento.

Prevención
La transmisión sexual del VIH se puede evitar mediante:
Relaciones monógamas entre personas no infectadas.
Sexo sin penetración.
Uso correcto y consistente de preservativos masculinos y femeninos.
Sexo entre dos personas cuando una de ellas vive con el VIH, pero está en tratamiento antirretroviral y tiene una carga viral indetectable.
Administración de profilaxis preexposición a personas que no están infectadas por el VIH.
La circuncisión médica masculina voluntaria reduce las posibilidades que tienen los hombres de ser infectados de VIH por una mujer.
Sí se puede vivir con sida
El primer paso es aceptar la enfermedad. El sida es un virus que se ha ido contrarrestando con el paso del tiempo y los nuevos avances. Siguiendo el tratamiento y cuidando la alimentación se mejoran las expectativas de vida.
Tratamiento
No existe una cura para el VIH. Sin embargo, para tratar la infección por el VIH se utilizan medicinas antirretrovirales. Funcionan contra la infección por el VIH bloqueando la reproducción del virus en el cuerpo. Cuando una persona que vive con el VIH sigue un tratamiento efectivo, no vuelve a contagiar. Este tratamiento reduce drásticamente las enfermedades y las muertes relacionadas con el sida.
Sin tratamiento la infección por VIH puede durar asintomática de 5 a 10 años.
SIDA Y LA COVID-19
Las personas que tienen el VIH son pacientes de más alto riesgo, debido a que su sistema inmunológico es débil y se encuentran más vulnerables ante la covid-19. Por esta razón, es necesario que tomen las precauciones necesarias y, si presenta síntomas, busquen ayuda profesional.

EN COLOMBIA
109.056 personas viven con la enfermedad en Colombia, de las cuales 10.930 fueron casos nuevos (reportes de 2019 de la Cuenta de Alto Costo).
Con 49 casos por cada 100.000, siguen siendo los hombres quienes más contraen esta enfermedad, según el Instituto Nacional de Salud.
EN CARTAGENA
268 casos notificados al Sigivila a corte octubre 2020.
Más de 600 casos a corte diciembre 2019.
Más de 400 casos a corte diciembre 2018. (El año cerró con 474 casos).
El 70% de todos los casos se presenta en hombres.
Fuente: Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis).
EN EL MUNDO
38,0 millones de personas viven con el VIH (cierre junio 2020).
1,7 millones de nuevas infecciones por el VIH (cierre junio 2020).
26 millones de personas tienen acceso a la terapia antirretroviral (cierre junio 2020).
Fuente: ONUSIDA
Tenga presente:
A un 96% se reduce el riesgo de transmisión a una pareja sexual seronegativa si la pareja que vive con el VIH está bajo tratamiento antirretrovírico.
A un 43% desde 2003 han descendido las muertes asociadas al sida en todo el mundo.