La desnutrición crónica afecta a uno de cada diez adolescentes del país, concentrándose en indígenas (36,5%), niveles socioeconómicos bajos (14,9%) y aquellos que viven en zonas rurales (15,7%).
Así lo revela la Encuesta Nacional de Situación Nutricional de Colombia (ENSIN). Al respecto, la jefe del servicio de nutrición del Hospital San José, Claudia Esperanza Medina, indicó que en la nación se debe aumentar el trabajo en pedagogía para atacar el problema.
Algunas cifrasLa ENSIN indica que la desnutrición aguda en menores de cinco años está en 2,3%, un promedio mucho más bajo del manejado a nivel mundial (7%), pero según Medina, sigue siendo una cifra que no es positiva.
En cuanto al padecimiento crónico, la cifra está en 10,8%, con lo cual Colombia no ha llega a la meta de reducirla a 8%, de allí la necesidad de implementar acciones que permitan reducir los casos que se presentan en el corto plazo. La desnutrición global se ubica en 3,7%, desafortunadamente representa un aumento con respecto a la edición anterior de la encuesta que la ubicaba en 3,4%, evidenciando un retroceso en las intervenciones.
Lactancia adecuada, clave para evitarla“La leche materna el único alimento adecuado para un niño desde su nacimiento hasta los seis meses, después se convierte en un alimento, que debe ser complementado con la inclusión de otros alimentos en la alimentación del niño y debe ser suministrado por lo menos hasta los dos años. La leche materna tiene los nutrientes que realmente requiere el pequeño en cada etapa de su crecimiento, es tan adaptable e importante que –incluso- si un niño nace prematuro, la leche se adapta a ese evento, es un algo que no se puede reemplazar para lograr el crecimiento del bebé y su nutrición”, explicó la experta del Hospital San José.
Sumado a ello, agregó que en muchas ocasiones detrás de los problemas de desnutrición está la inadecuada finalización del tiempo de lactancia materna o porque se inicia la alimentación complementaria de una manera errónea.
Para evitar que la desnutrición se complique o pase a niveles más complejos para tratar, las personas deben hacer seguimiento permanente del peso y talla de los menores en cada consulta con el pediatra o en el hogar, además los médicos hacen seguimiento al perímetro de la cabeza de los chicos, esas medidas más el comportamiento en el consumo de alimentos son síntomas de los que se debe estar pendiente, también pertinentes para el cuidado en adultos.
Existen otros síntomas que se deben verificar, por ejemplo, la calidad del cabello, la piel o las uñas, cuando hay deficiencias de algunos nutrientes específicos se hacen evidentes en estas partes del cuerpo.
En el tema de educación, es imperativo instruir en temas como la lactancia materna, ya que Medina asegura que hay un alto porcentaje de madres que no están cumpliendo con los periodos necesarios, existen casos donde ellas a los dos o tres meses empiezan a introducir en la alimentación de los bebés fórmulas lácteas generando complicaciones, todo por desconocimiento de la importancia en completar el proceso de manera adecuada.
Para finalizar y mirando las cifras positivas, el país logró que el 72% de los menores de 2 años de edad reciban lactancia materna en su primera hora de vida, con lo que superó la meta establecida por la OMS y el UNICEF de mejorar el inicio temprano de la lactancia materna en al menos 70%.
