El Consejo Departamental de Gestión del Riesgo de Sucre, levantó la calamidad pública que estaba vigente mediante Decreto por ola invernal en este departamento y anunció que continuará el plan de atención a la población que resultó damnificada en las subregiones del San Jorge, La Mojana, entre otros.
La calamidad pública había sido declarada en el mes de junio anterior y prorrogada en el mes de agosto por tres meses más, debido a las afectaciones que en su momento se presentaron en los municipios de Guaranda, Majagual, San Marcos, Caimito, San Benito Abad y La Unión a causa de las inundaciones por el desbordamiento del río Cauca y el rompimiento en el punto conocido como Care e’ Gato, en (San Jacinto del Cauca).
Los miembros del Consejo de Gestión del Riesgo votaron por unanimidad y aprobaron el retorno a la normalidad.
“Se retorna a la normalidad frente al acto administrativo que se había expedido con ocasión de la temporada invernal. Se dejan abiertas las actividades y el plan de acción para seguir estando atentos a cualquier situación que se presente”, dijo Andrés Vivero, director (e) de la Unidad Administrativa Especial para la Gestión del Riesgo, Atención de Desastres y Cambio Climático.
Durante la reunión del Consejo de Gestión del Riesgo estuvo presente una delegación de EPM, la cual realizó la presentación del estado de avance de obras del Proyecto Hidroituango, su plan de emergencias y de contingencias, para prevenir daños, riesgos o posibles desastres.
En el departamento de Sucre la ola invernal dejó damnificadas más de 80 mil personas, principalmente en la subregión de La Mojana, al igual que millonarias pérdidas de cultivos y animales.
Temporada de incendios.
El Ideam inició el periodo de transición entre la segunda temporada de lluvias del 2021 y la primera temporada seca o de menos lluvias del 2022, que se extendería hasta mediados del mes de marzo.
En Sucre, ya están organizando planes de prevención con los municipios y alertas tempranas, a fin de reaccionar ante cualquier eventualidad con respecto a los posibles incendios que se presenten con ocasión de la temporada de sequía y la disminución de las lluvias en la región Caribe