La bebé de dos meses, de la comunidad Embera Katío, perteneciente al resguardo del municipio de Tierralta, en el departamento de Córdoba, murió en el Hospital San Jerónimo de Montería, por los obstáculos administrativos que surgieron para poderla remitir a una Unidad de Cuidados Intensivos para niños.
La denuncia la hizo el defensor nacional del Pueblo, Carlos Camargo, quien pidió a las autoridades competentes que adelanten las investigaciones, que permitan aclarar las circunstancias, y establecer las sanciones para quienes resulten responsables.
“En el caso de la niña de la comunidad indígena Embera Katío, procedente del resguardo Koredó, del municipio de Tierralta, hubo graves barreras de acceso que preocupan a la Defensoría del Pueblo, dado que la Nueva EPS no autorizó la remisión porque no contaba con afiliación. Aunque sus padres son usuarios de la EPS, la bebé no tenía Registro Civil de Nacimiento, documento que dolorosamente fue expedido una hora después del fallecimiento de la bebé Embera”, manifestó el defensor del Pueblo.
Reiteró que resulta inconcebible que por obstáculos administrativas se pierda la vida de una bebé, que debió recibir atención sin importar si estaba o no afiliada oficialmente al sistema de salud y que, además, por pertenecer a un grupo étnico, debió ser tratada con protección reforzada.
"El dolor de su familia es también es nuestro dolor y trasciende las dimensiones sociales. En un Estado Social de Derecho no puede permitirse que, por negligencia y trámites ordinarios, sigan poniéndose en riesgo la vida de los niños y niñas”, puntualizó el funcionario.
También prendió las alarmas por el riesgo en el que se encuentra otro niño de la misma comunidad. Se trata de Lian Erick Pernía, de cuatro meses de edad. el cual no ha sido afiliado a la EPS Cajacopi y requiere ser trasladado a un nivel de complejidad más alto para recibir tratamiento, por una grave infección respiratoria que pone en riesgo su vida.
Llamó la atención por la desnutrición que padecen los niños de las comunidades indígenas, indicando que se requiere de una intervención urgente, pues se trata de miembros de la primera infancia.