Suspender las clases y protagonizar plantones parece haberse convertido en la forma más común y eficiente de los padres de familia y estudiantes para pedir solución a los problemas que viven en sus instituciones educativas, así quedó demostrado ayer en la IETA Buena Esperanza de Turbaco, donde cuatro meses después de la última protesta, nuevamente la comunidad se tomó las instalaciones para exigir el desmonte del coliseo que amenaza con desplomarse, poniendo en riesgo la vida de los más de mil estudiantes que tiene la sede.
Según refirió Alexander Ramos, representante de los padres de familia, desde el 2010 vienen reclamando la intervención del coliseo cubierto que se ha ido cayendo a pedazos y pese a que en la última reunión hecha en noviembre del año pasado con la Secretaría de Educación departamental y demás autoridades se definió que este sería desmontado, a la fecha no se ha cumplido.
“El desmonte del coliseo ha sido una lucha de años que hemos tenido con las administraciones, la última reunión que tuvieron fue en noviembre del año pasado, en la que la Secretaría de Educación departamental dijo que iba a hacer el desmonte, pero llegó este año y nada, fuimos en febrero y nos dijeron que la Alcaldía de Turbaco ya tenía la orden y en la Alcaldía nos dicen que es la Gobernación, queremos que sean claros, esto no da espera, el coliseo se ha convertido en una bomba de tiempo”, expresó Ramos.
Debido al incumplimiento y la preocupación que representa esta situación, los padres decidieron que no permitirán que las clases sigan hasta que las autoridades locales y departamentales actúen.
“No vamos a abrir ni a permitir el ingreso hasta que vengan soluciones, los padres seguiremos en pie de lucha con esto”, agregó Ramos.
Además del problema del coliseo, agregaron que este año los estudiantes no han tenido clases de inglés debido a la falta de docente, así mismo desde octubre, cuando se pensionó el docente de sociales, la vacante tampoco ha sido suplida. “La falta de docentes no solo perjudica la calidad educativa de nuestros hijos, también preocupa porque los alumnos se van al coliseo o el rector muy amablemente saca a los profesores para que vayan a atender a los estudiantes que están sin docente”.
Finalmente Ramos expresó que también les prometieron la construcción de un megacolegio, el cual al parecer se construiría con recursos de una empresa privada, la Alcaldía y la Gobernación, pero este no se ha podido concretar.
“Queremos saber qué pasó con el megacolegio, a nosotros nos mostraron incluso la maqueta de cómo iba a quedar el colegio, la empresa Argos daría la mitad de los recursos y la Gobernación y la Alcaldía el resto, pero no sabemos qué ha pasado”, puntualizó.
La secretaria de Educación de Turbaco, María Margarita Cabarcas, expresó que el problema del coliseo es una situación que se viene dando hace más de 10 años, sin embargo el 26 de noviembre, en la última reunión, expusieron la situación tan peligrosa y delicada, sin embargo por ser Turbaco un ente no certificado en educación “es la Secretaría de Educación departamental la directamente responsable”.
“Dentro de los compromisos adquiridos en la última reunión nosotros debíamos como municipio hacer un diagnóstico del comité de gestión de riesgo, este se hizo y el 23 de enero se radicó en la Gobernación, se definió que definitivamente se tenía que hacer el desmonte, pero como no ha habido una respuesta los padres piden intervención del departamento”, dijo Cabarcas. La secretaria agregó que ayer realizaron una mesa de trabajo con los padres y docentes de la IETA en la que se definió que hoy tendrían una reunión con la Secretaría de Educación departamental para dar respuestas concretas a las inquietudes planteadas por los padres, especialmente a la del coliseo.




En la institución educativa técnica agropecuaria del corregimiento de Sincerín, también protestaron ayer debido a que la sede de preescolar fue víctima de robo la noche anterior, se llevaron un equipo de sonido y una impresora. Los docentes aseguran que no es la primera vez que se presenta esta situación, pues en otras ocasiones han ingresado a la sede a robarse las meriendas de los alumnos y equipos del lugar.
Por su parte, en el corregimiento de Rocha los padres de familia declararán paro desde hoy y hasta que les asignen vigilantes a las dos sedes educativas.