En la vereda Las Brisas, ubicada en el corregimiento de Astilleros, municipio de San Jacinto del Cauca, la Gobernación de Bolívar puso en marcha la construcción de un nuevo acueducto que beneficiará a más de 500 habitantes de esta zona de la subregión de La Mojana. Se trata del octavo proyecto de este tipo iniciado en lo que va del año 2025, como parte de un ambicioso plan departamental en materia de agua potable y saneamiento básico.
Hasta esta comunidad rural llegó la gerente de Aguas de Bolívar, Eliana Romero Valiente, para socializar los detalles del proyecto y formalizar la conformación de la veeduría ciudadana encargada de hacer seguimiento a la ejecución de las obras. Lea: Bolívar mostrará su talento artesanal en la feria AMA en Barranquilla
Según información de la Gobernación de Bolívar, el sistema de acueducto tendrá una inversión de $865 millones y contempla el suministro e instalación de 2,198 metros lineales de tubería de conducción, la instalación de una PTAP compacta de 2.5 litros por segundo y la construcción de dos tanques de almacenamiento en concreto reforzado.

“Somos Agua Somos Vida es el nuevo plan de inversiones en materia de agua potable y saneamiento básico, ejecutado por el gobernador de Bolívar, Yamil Arana Padauí, con el cual se pretende facilitar el acceso de 195 mil personas a los servicios de acueducto y alcantarillado, con una inversión histórica de 369 mil millones de pesos y cerca de 805 empleos directos “, explicó Romero Valiente al presentar el alcance del proyecto.
Las Brisas es una comunidad rural dispersa ubicada en la margen occidental de San Jacinto del Cauca, donde la mayoría de sus habitantes se dedica al cultivo de pancoger ya la siembra de arroz en extensas áreas, en una zona que hace parte del complejo de humedales de la Depresión Momposina, reconocido por su valor ambiental y ecológico a nivel nacional.

Para sus habitantes, la llegada del agua potable representa la solución a una necesidad aplazada durante décadas. “Son muchas las carencias en materia de necesidades básicas insatisfechas que padecemos, pero hoy el agua está muy cerca de ser una realidad. Estamos más que agradecidos con la Gobernación por esta importante obra que nos traerá progreso y desarrollo“, expresó Marciana Esther Ríos Correa, líder comunal de la vereda.
Actualmente, el acceso al agua en esta zona depende del transporte en canecas, burros o motocicletas desde caños y ciénagas cercanas, mencionó la Gobernación. Con la construcción del nuevo sistema, se espera un cambio profundo en las condiciones de vida de las 72 familias que conforman la comunidad.
“Con el nuevo acueducto, el agua traída de caños y ciénagas en canecas, burros y motos será historia. Son 580 personas pertenecientes a 72 familias que cambiarán potencialmente sus vidas con la llegada del agua potable a sus viviendas“, concluyó Eliana Romero Valiente.
