Siete municipios de Córdoba fueron declarados en calamidad pública debido a la intensa sequía que azota al departamento. Se trata de Planeta Rica, Pueblo Nuevo, Ciénaga de Oro, Chinú, Canalete, La Apartada y Moñitos.
De acuerdo con lo señalado por el coordinador de la Oficina de Atención de Desastres de Córdoba, Aldrin Pinedo, en esas mismas localidades se decretó la alerta amarilla por amenaza de incendios forestales.
También se estableció que hay 14 localidades más en las que se podría decretar la misma medida, las cuales serían Cotorra, Canalete, Moñitos, San Bernardo del Viento, Puerto Escondido, San Antero, Montería, Momil, Los Córdobas, Cereté, Chimá, Lorica, San Pelayo y Tuchín, donde se agotó la existencia de agua.
Ante esa situación, las autoridades diseñaron un plan de contingencia con el fin de distribuir el líquido en carro tanques con el fin de garantizar el vital líquido a la comunidad, pues todos los pozos están secos.
La situación ha ocasionado incendios en distintas poblaciones. En Montería, por ejemplo, diariamente se registran entre cinco y siete incendios forestales provocados por las altas temperaturas, según confirmaron voceros del Cuerpo de Bomberos.
El fenómeno también ha ocasionado la escasez de algunos alimentos, especialmente leche y queso, y el incremento en algunos productos que están escasos por las duras condiciones climáticas.