Fue declarada la calamidad pública a nivel departamental, por un período inicial de 90 días, dada la gravedad de la situación presentada por el desabastecimiento de agua en los municipios de Cereté, Ciénaga de Oro, Sahagún y San Carlos.
La decisión se tomó en el Comité Departamental de Gestión del Riesgo de carácter extraordinario, luego de analizar las características del daño que sufrió la planta de captación de Auniaguas por procesos de erosión en la zona.
De acuerdo con lo señalado por la gobernadora de Córdoba, Sandra Devia, con la mencionada declaratoria se busca solicitar las ayudas pertinentes ante la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y para adoptar los planes de contingencia para la distribución de carrotanques de agua potable para estas localidades.
Estableció además que gestionarán recursos ante el Órgano Colegiado de Administración y Decisión, Ocad, de regalías, con el fin de proveer maquinarias que nos permitan hacer las obras de mitigación, contención y solución definitiva del problema.
La funcionaria dijo también que gestionarán recursos de regalías para financiar actividades como la compra de motores para poner a operar unos pozos en Sahagún, con el fin de abastecer de agua a este municipio, mientras se hacen las adecuaciones finales que lleven el caudal a unos 550 metros cúbicos por segundo, lo que se requiere para normalizar la prestación del servicio.
Así mismo se plantean obras de adecuación de toda la planta de captación, la estabilización del terreno y el alquiler de vehículos adicionales para la distribución del preciado líquido en zonas donde aún no ha llegado el agua potable.
Agua en carro tanques
Con el fin de atender la emergencia se plantea la llevada de agua potable en carrotanques, labores que serán coordinadas con los municipios afectados, con el apoyo de Defensa Civil, Cruz Roja, Ejercito Nacional, Policía, y la Armada.
Otra de las acciones incluye la realización por parte de la Secretaría de Salud de un barrido en los centros asistenciales de baja complejidad para verificar si se han presentado personas con afectaciones en su salud, a causa del desabastecimiento de agua; además de la ubicación de tanques portátiles de almacenamiento de agua de 8 mil litros en zonas más afectadas, esto con el apoyo de Uniaguas.
La situación es difícil resolver, pero según Andrés Sepúlveda ingeniero de Uniaguas, ya se está bombeando agua con un solo motor y que entre jueves y viernes de esta semana, se realizarán las pruebas de bombeo del segundo motor, como habitualmente venía trabajando, lo que permitirá contar con el caudal suficiente para distribuir el servicio a los otros municipios afectados.
Actualmente el servicio de agua logra llegar hasta las localidades de Cereté y San Carlos, toda vez que la bomba que actualmente se encuentra operando, tiene capacidad de distribución para dos municipios.