Hablar del aguacate criollo en los Montes de María es escribir otro capítulo de aquellos años en que los campesinos de la Alta Montaña, que conforman esta subregión en el departamento de Bolívar, tenían garantías para habitar en el campo.
Según Senen Arias Aragón, miembro de la Asociación de Productores de Aguacate Tecnificado de los Montes de María (Asproatemom), desde el 2005 hasta la fecha unos 2.000 productores han perdido más de 5.000 hectáreas de árboles a raíz del ataque del hongo conocido como la Phytophthora o fitóftora, el cual genera que se pudran las plantas.
Indicó que debido a esto la calidad de vida de las familias campesinas ha desmejorado en un gran porcentaje, y a ello hay que agregarle los estragos que les generó la guerra que los obligó abandonar sus tierras.
Para los campesinos que aún tienen árboles las cosas son menos complejas, porque el fruto tiene buena acogida en distintos mercados como Bogotá, Medellín, Cali, San Andrés Islas y toda la región Caribe.
Arias asegura que a pesar de los grandes esfuerzos que han realizado desde el Ministerio de Agricultura para proteger los árboles, los frutos se siguen perdiendo porque es atacado directamente por el hongo.
Agregó que también se pierde por el mal estado en que se encuentran las vías terciarias, y en una hectárea cultivada se dañan al rededor de 5.000 aguacates, lo que equivale a 50 bultos.
Arias solo cuenta actualmente con 1.000 hectáreas que son las que están produciendo, pero necesitan recuperar el cultivo y para ellos requieren de un proyecto de inversión integral que esté acompañado del manejo fitosanitario, buenas prácticas agrícolas, arreglo de la malla vial y la construcción de un acuerdo para establecer los viveros.
El aguacate de los Montes de María tiene mercado asegurado, pero necesitan más intervención de los cultivos y la implementación de otras variedades para suplir el faltante, que se presenta en varios meses del año.
Dijo que el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) se está quedando corto en sus intervenciones y las universidades tampoco están realizando investigaciones sobre el problema que afecta los cultivos.
Senen indicó que esperan que la producción para este año sea buena, pero necesitan arreglo de las vías de manera inmediata aprovechando el verano.
Jorge Montes, líder de la Alta Montaña de El Carmen de Bolívar, refirió que actualmente la condición en que están los campesinos que han perdido los cultivos es crítica y ya no son autosuficientes porque se dedicaron solo a ese cultivo y descuidaron los demás.
“Cada día estamos más pobres porque no contamos con el potencial para poder avanzar y el Estado nos ha abandonado y los proyectos que nos traen no son sostenibles en el tiempo”, dijo Montes.
Además, le piden al Ministerio que los ayuden a recuperar todo el cultivo que se ha perdido hasta hoy o cómo reemplazarlo por otras variedades que ayuden a la reactivación del campo.
“Nosotros nos mantenemos en la tarea de buscar una forma en que las instituciones le apuesten a restaurar el cultivo del aguacate montemariano”, añadió.
Actualmente están realizando un censo de todos los afectados por la muerte de los árboles para entregársela al Ministro de Agricultura el próximo 7 de febrero.
Recalcó que si no se desarrollan políticas que les permitan mantenerse en el campo, se puede presentar un desplazamiento porque esa situación se ha convertido en un conflicto, ya que siembran y los precios son muy bajos en los mercados.
Danilo Contreras Guzmán, secretario de Agricultura de Bolívar, explicó que para lograr obtener las herramientas suficientes para atender la problemática del aguacate criollo, le enviaron una carta al Ministerio de Agricultura, para lograr una reunión en El Carmen de Bolívar para abordar el tema.
El funcionario indicó que lo que pretenden es que todas las entidades responsables definan un plan de acción para encontrar de una vez por todas la solución que frene el hongo fitóftora, que ha provocado la disminución de los cultivos.
Contreras dijo que están trabajando para que nuevamente el 27 % de la producción nacional de aguacate salga de esa subregión, ya que hoy no alcanzan si quiera al 7 %.
De manera que esa economía que los campesinos llamaban el ”oro verde”, hoy está totalmente disminuida y ya es hora que se tomen las medidas correspondientes en el sentido de coordinar mucho más los esfuerzo que vienen realizándose.
El funcionario dijo que el Departamento tiene una serie de limitaciones que lo conllevan acudir al Ministerio, ya que es el actor principal para determinar acciones inmediatas. Para el mantenimiento de un cultivo silvestre tienen que promover su tecnificación y el posicionamiento de su fruto.
