Cincuenta jóvenes en condiciones de vulnerabilidad de los barrios Botero y Altos del Rosario de Sincelejo, disfrutaron de una tarde llena de color, ofrecida por Secretaría de Asuntos Sociales y Corregimentales.
Estos muchachos, con apoyo de dicha cartera, pintaron un mural en la parte posterior de las gradas de la cancha de fútbol de Botero, a través del cual dejaron plasmado su deseo de paz y de dejar a un lado todo acto de violencia.
Según Mary Saldarriaga, secretaría de Asuntos Sociales y Corregimentales de Sincelejo, este acercamiento se realiza con el propósito de generarles espacios de confianza y conocer sus estilos de vida, promoviendo iniciativas de reconciliación.
“Los jóvenes realizaron una jornada de limpieza y embellecimiento del escenario, pues ellos pretenden recuperar este espacio de esparcimiento y usarlo como lugar de encuentro para reunirse y compartir sus experiencias”, sostuvo Saldarriaga.
Para el alcalde de Sincelejo, Jacobo Quessep, una de sus prioridades es tener una ciudad más inclusiva donde prevalezca la igualdad entre los ciudadanos; por ello, dentro de las iniciativas sociales está llegar hasta los sectores vulnerables de la capital sucreña.
