Seis mil estudiantes del municipio de Puerto Escondido (Córdoba) no han podido retornar a clases luego de la Semana Santa debido a que los profesores no han vuelto a sus sitios de trabajo, luego de ser amenazados.
El presidente de la Asociación de Maestros de Córdoba (Ademacor), Domingo Ayala, indicó que es necesario que las autoridades garanticen la seguridad de los docentes que han sido víctimas de llamadas amenazantes y extorsivas para que les garanticen la seguridad y así puedan retornar a sus puestos de trabajo.
Por su parte, el secretario de Educación departamental, William Tapia Espitia, se reunió de nuevo con las docentes víctimas de microextorsión en Puerto Escondido para informarles sobre los avances de los procesos de investigación que adelantan las autoridades sobre cada una de las denuncias que en ese sentido se han formulado.
El funcionario explicó que en cuanto se produzcan los primeros resultados de estas indagaciones, las cuales están en manos de los organismos de inteligencia del Estado, se programará una nueva reunión para dar a conocer la situación.
De igual forma indicó que el próximo viernes, 5 de abril, se llevará a cabo un consejo de seguridad en el municipio de Puerto Escondido donde se estudiará el tema de microextorsión que afecta a los educadores, al cual asistirán también el secretario de Interior de Córdoba, John Moisés Besaile Fayad; el alcalde de esa localidad, Camilo Torres Becerra, miembros de la fuerza pública, Defensoría del Pueblo y Procuraduría.
El titular de la cartera educativa indicó que gracias a las jornadas de capacitación y sensibilización, organizadas por la Gobernación de Córdoba y la Fuerza Pública en todo el Departamento, las microextorsiones se han paralizado y los docentes han ido retornando paulatinamente a sus instituciones educativas.
Exhortó a los docentes y a la comunidad en general a confiar en las autoridades y a denunciar cualquier situación anómala para evitar todo tipo de violencia en el departamento.
Los profesores señalan que no hay las garantías necesarias y que no han vuelto a sus labores académicas por temor a que los miembros de bandas criminales o delincuentes comunes atenten contra sus vidas.
Finalmente, el comandante de Policía en Córdoba, coronel Jaime Ávila, dijo que se están haciendo las investigaciones pertinentes porque si bien es cierto hay amenazas serias contra profesores, también hay otras que no son reales y que pueden obedecer a un deseo de traslado.
