La Procuraduría General de la Nación ordenó la destitución de seis notarios cordobeses que plagiaron tesis, haciéndolas pasar como libros propios, para obtener un mayor puntaje en el concurso de nombramiento de notarios en propiedad.
Los implicados en Córdoba son Lázaro De León De León, notario segundo de Montería; Gabriel Alberto Portacio Mendoza, notario de Buenavista; Hernán Diomedes Cortés Uparela, notario de Planeta Rica; Emilia Márquez Osorio, notaria de San Andrés de Sotavento; Jorge Elías Morales Dix, notario de San Antero, Carlos Pineda Palencia, notario de Tierralta, y Francisco Antonio Mercado Sánchez, notario de Lorica.
El fallo está firmado por los procuradores primero y segundo delegado, Juan Carlos Novoa Buendía y María Eugenia Carreño Gómez y en el mismo se hace una modificación de la sentencia pues en un fallo anterior además de suspenderlos, también los inhabilitaban por espacio de 16 años. Sin embargo, luego de las apelaciones hechas por los abogados se levantó la sanción de la suspensión.
La actitud de los notarios fue considerada por la Procuraduría como una falta gravísima y cometida a título de dolo por el conocimiento y la voluntad que caracterizaron sus comportamientos ya que su actuación estuvo dirigida al propósito inequívoco de suministrar datos inexactos o documentos que no correspondían con la realidad para conseguir la inclusión en la carrera administrativa de manera consciente y deliberada.
Como se recordará los notarios de esta sección del país contrataron a John Prieto, una persona encargada de hacer los registros de algunas obras como si fueran de la autoría de los notarios para ganarse cinco puntos en el concurso.
Prieto tomó obras de estudiantes de la Javeriana y de la Universidad de Caldas y las registró como si fueran libros escritos por los notarios, hecho que finalmente salió a la luz pública y fue investigado por la Superintendencia de Notariado y Registro y finalmente enviado a la Procuraduría General de la Nación para la sanción respectiva.
Hay que indicar que varios de los notarios fueron suspendidos de sus cargos desde hace varios años como en el caso de Montería donde Lázaro de León estuvo hasta el 17 de junio de 2010 al comprobársele que plagió la obra Acumulación de procesos de alimentos y ejecutivos de alimentos, realizado por un estudiante de la universidad Javeriana.
