Mientras con el paso de las horas aumentan las quejas por la mala prestación de los servicios de salud en Córdoba y se incrementa la deuda con los trabajadores los políticos de esta sección del país pelean como ‘gato boca arriba’ los cargos directivos de los centros hospitalarios.
Los procesos de selección por lo menos en 12 centros asistenciales se encuentran paralizados debido a que en las universidades encargadas de hacer los procesos de selección no resisten la interferencia de los jefes políticos llamando para pedir una ‘ayuda extra’ a sus recomendados para que queden en el primer lugar en el examen.
Los centros educativos pidieron la intervención de los organismos de control para adelantar el proceso y para de esa forma ‘blindarse’ de los jefes políticos que llaman directamente a sus amigos directivos para pedir que manipulen los procesos.
En medio de esa ‘guerra sucia’ el presidente del sindicato de trabajadores de la salud en Córdoba, Carlos Sánchez, dijo que la situación de la salud en Córdoba es caótica y que por lo menos a 2.500 trabajadores les adeudan sus salarios.
Explicó que la situación más crítica se registra en el municipio de Chimá en cuyo centro de atención de urgencias adeudan 32 meses de salario a 15 trabajadores y no ha habido forma de pagarles su trabajo.
Los pasivos en Chimá asciende a más de dos mil millones de pesos y literalmente en el Camu no hay nada para atender a los pacientes, ni abanicos porque si quieren estar frescos tienen que llevarlos de sus casas.
El directivo de Anthoc advierte que irónicamente en los últimos años las inversiones en obras de infraestructura en los centros asistenciales asciende a un billón de pesos.
“Los recursos que mandan a Córdoba para la salud serían suficientes para garantizar una buena atención si estuvieran bien manejados”, indicó el presidente de Anthoc.
Hay municipios como Ayapel en donde están enfrascados en la pelea por la dirección, proceso que adelantó la Universidad del Norte, con demandas y contrademandas por los resultados del examen pero hay 42 trabajadores sin sueldo desde hace ocho meses.
Las cuentas del centro asistencial están embargadas por las deudas con personas que han estado al servicio de la institución y la nueva ambulancia que regaló la administración anterior ya fue estrellada de tal forma que a los pacientes tienen que trasladarlos en carros particulares sin que llenen los mínimos requisitos para garantizar la vida del paciente.
De igual forma deben a los trabajadores de hospitales de Chinú, Montelíbano, Planeta Rica, San Bernardo del Viento, San Pelayo, Lorica, Momil, San Antero y Lorica.
Montería no se escapa de la crisis. Hay más de 30 profesionales aspirando al cargo de dirección pero la situación económica tampoco es la mejor pues tiene una cartera cercana a los 23 mil millones de pesos.
El vocero de los trabajadores dijo que han venido haciendo las denuncias pertinentes pero que hasta el momento los organismos de control no han hecho caso.


