El Incoder con el apoyo de la Policía Nacional, a través del grupo de Protección Ambiental, serán los encargados de adelantar el control del cumplimiento de la veda del bagre rayado en esta región de la Costa Norte.Voceros de este grupo dieron a conocer que se está informando a los titulares de los permisos, tanto para la comercialización como para el cultivo, a los pequeños comerciantes de la cuenca del río Magdalena y ciénagas aledañas sobre la veda que existe sobre el bagre.
Dicen que se les está explicando el por qué se prohíbe la comercialización, transporte, captura y mantenimiento de cualquier tipo de presentación de este producto pesquero.
La primera veda del producto comenzó a regir desde el pasado 1 de mayo y se extiende hasta el 31 del mismo mes.
Según las medidas establecidas, a todas aquellas personas que sean sorprendidas incumpliendo esta norma, las autoridades podrán decomisar la totalidad del producto y se donará a centros de beneficencia para la comunidad más necesitada.
De igual manera se conoció que el objetivo de esta veda es permitir la reproducción y lograr la recuperación de este especie que se encuentra en vía de extinción.
Sostienen que el bagre rayado es una especie piscícola, que se encuentra en ríos, ciénagas y áreas de inundación.
Es un pez que alcanza grandes tallas, llegando hasta los 150 centímetros de longitud y 30 años de edad, en términos generales su crecimiento es lento, dicen los especialistas.
La entidad que reglamenta las medidas sobre el bagre rayado manifiesta que estas determinaciones se toman con el fin de proteger esta especie y permitir su reproducción y lograr así que aumente su población y su talla de captura.
