El miércoles pasado la plenaria del Senado hundió la consulta popular presentada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro, con un total 49 votos en contra y 47 a favor. Sin embargo, hay mas sorpresas que han salido a la luz.
La revista Semana reveló que en la Casa de Nariño no contaban con el voto del senador cartagenero Jorge Benedetti, del Cambio Radical, ya que, según el medio, había pedido una licencia no remunerada y estaba en Madrid.
Ante la posibilidad real de que la iniciativa presidencial pudiera pasar, el medio también señaló que el director de Cambio Radical, Germán Córdoba, le solicitó que volviera de inmediato a Colombia. Lea también: Consulta popular: las reacciones después de la decisión en el Senado
Además de Benedetti, hubo otro voto en contra a la consulta popular
Desde Semana anunciaron que también sorprendió la reaparición del senador Ciro Ramírez, del Centro Democrático, destacando que retomó su curul tras recobrar la libertad en medio de la investigación por el escándalo de “las Marionetas”.
Cabe recordar que el senador Benedetti, el día después del hundimiento de la consulta popular, le contó a El Universal que este resultado “no fue un capricho, sino un acto de responsabilidad con el país”.
“Mientras el Gobierno insiste en gastar $700 mil millones en un espectáculo electoral, millones de colombianos exigen soluciones urgentes en salud, empleo y seguridad. Esta no era una consulta para escuchar al pueblo: era un intento de imponer una voluntad personal, usando recursos públicos en plena campaña anticipada”, manifestó el senador.

Sobre la reforma laboral
También expresó que están de acuerdo con una reforma laboral que se construya “con debate, tecnicismo y responsabilidad”.
“No nos vamos a dejar amedrentar por arengas ni amenazas. Colombia necesita reformas que dignifiquen el trabajo, no discursos polarizantes que solo profundizan el caos. Le puede interesar: Cabildo popular en Cartagena tras llamado de Petro
“Mientras el Gobierno marcha, nosotros pedimos que se gobierne y se le den soluciones a los problemas reales del país. Mientras unos convierten la indignación en odio, nosotros la convertimos en propuestas”, concluyó Benedetti.