El senador costeño, Efraín Cepeda, fue postulado el 20 de junio como candidato único por los Conservadores para presidir el Congreso a partir del 20 de julio. Al asumir Cepeda la presidencia del Senado, dejó la presidencia del partido a la senadora cartagenera Nadia Blel, según lo acordado.
Los conservadores son la fuerza política dominante en Bolívar. Controlan la mitad de los representantes del departamento en la Cámara y cuentan con la senadora más votada del país, Nadia Blel. En las elecciones de 2022, Blel obtuvo 165 mil votos, repitiendo su curul por tercera vez consecutiva en el Senado. Su éxito electoral fue impulsado por su alianza con Yamil Arana, actual Gobernador de Bolívar, quien también demostró una fuerte capacidad de movilización electoral en su período de representante a la Cámara. Le puede interesar: Los Blel se preparan para asumir la presidencia del Partido Conservador
Primera mujer presidenta de los godos: una cartagenera
En una conversación exclusiva con El Universal, Nadia Blel, recién nombrada presidenta del Partido Conservador y primera mujer en ocupar este cargo, aborda los desafíos y metas de su nueva dirección. En una entrevista reveladora, Blel expresa su compromiso con la conciliación y la construcción de un país más unido, resaltando la importancia de los jóvenes y las mujeres en este proceso. La senadora cartagenera también comparte su visión sobre la independencia del partido, su postura frente a las políticas del gobierno actual, y su firme rechazo a la reelección presidencial, subrayando su propósito de llevar adelante una “presidencia de las regiones” que impulse el desarrollo y la autonomía regional en Colombia.
Senadora, es la primera mujer presidenta del Partido Conservador. ¿Cómo se siente usted con esta histórica decisión y ese reto además?
Nadia Blel: Yo creo que es un enorme reto, pero tengo la certeza de que no voy a ser inferior a él. Esta trayectoria en el Senado, pero sobre todo la fe y la confianza que ha depositado la bancada y los colombianos, son mi mayor inspiración y mi mayor motor. Y sobre todo, en este momento donde hay tanta convulsión, donde vemos tanto confrontamiento, creo que ese toque conciliador de las mujeres no solamente es lo que el partido, sino lo que el país necesita.
Muchas voces políticas sugieren que su llegada representa una renovación para el partido. ¿Qué opinión le merece esto?
NB: Yo recibo un partido en independencia. Pero sí considero que más que mi llegada, a mí me gustaría que los colombianos vieran en el Partido Conservador ese faro de esperanza, esa opción no solamente de construcción, sino también de conciliación. Siento que hay un país enfrentado y que esa confrontación no le hace bien a nadie. Por eso pienso que en los jóvenes, en las mujeres y en las nuevas generaciones está ese camino de construcción que necesita Colombia, dejando atrás ese pasado de enfrentamientos y violencia que ya está más que claro que no le hace bien al país. Siga leyendo: Así fue la primera reunión del presidente del Senado con el Gobierno Petro
Algunos creen que, dada su fuerza política en Bolívar, puede conseguir más proyectos desde su bancada. ¿Qué opina?
NB: Creo que la posición tanto del partido como la mía es que todo aquello que le genere bienestar a los colombianos, el partido y desde mi posición, lo voy a acompañar. Pero aquello que esté en contravía de nuestra Constitución, libertades y orden, lo rechazaremos rotundamente. Quiero insistir en que llego al partido con un ánimo constructivo, de consensos y conciliación. Cuando existan iniciativas perjudiciales a las libertades y derechos de los colombianos, las rechazaremos y nos opondremos con criterio y responsabilidad.
El presidente ha llamado otra vez a un acuerdo nacional. ¿Cree que es posible un acuerdo nacional con un gobierno polarizante?
NB: Desde el partido siempre hemos estado abiertos al diálogo, basado en el respeto. Hemos intentado dialogar y proponer nuestras ideas, pero no han sido acogidas. Si ahora existe esa disposición, estamos dispuestos a comenzar, pero todo dependerá de la reciprocidad por parte de ellos. Siempre dialogaremos en el marco del respeto, la institucionalidad y conforme a nuestra Constitución y democracia.
¿Cuál es la posición suya y del Partido Conservador frente a una reforma constitucional que busque la reelección del presidente?
NB: Nuestro partido siempre ha sido opuesto a la reelección presidencial. La actual ley que prohíbe la reelección fue una propuesta del Partido Conservador. No apoyamos la Asamblea Constituyente ni ningún mecanismo que desconozca las instituciones y el Congreso. Esta postura es clara y compartida por toda la bancada.
¿Qué posición tiene el Partido Conservador frente a la paz total y la situación en los territorios?
NB: En un partido donde el orden es fundamental, siempre estamos a la defensa y acompañamiento de nuestras fuerzas militares. Lamentablemente, en los últimos años se ha perdido el valor e importancia de estas fuerzas, incrementando la inseguridad y el microtráfico. Hay que buscar la paz, pero condicionada, sin beneficiar a grupos que continúan dañando al país.
¿Qué puede ganar la región de Bolívar y Cartagena con una presidenta del Partido Conservador de Cartagena y un presidente del Congreso costeño?
NB: Es un hecho histórico no solo por ser mujer y joven, sino también por ser caribeña y cartagenera. Quiero que esto sea un mensaje para las mujeres y jóvenes de que sí se puede. Espero que impulse nuevos liderazgos y voces que hagan bien al país. La región ha sido golpeada, y tener una presidenta de un partido de 175 años debe ser una voz de aliento y un mensaje claro para el gobierno sobre la importancia de esta región. Lea también: “El centralismo es un monstruo que impide la autonomía Regional”: Dumek
Usted mencionó que esta es una presidencia de las regiones, una presidencia en el territorio, ¿Qué opina sobre la autonomía regional?
NB: En verdad hay que darle una oportunidad a la autonomía regional. Hemos transitado por el modelo centralista y creo que es momento de buscar nuevas formas que logren el desarrollo de nuestras regiones. El presidente Petro y Name han mencionado esto en sus discursos. Creo que más desarrollo, inversión y autonomía de recursos en cada región puede ser una forma de lograr la paz. Mientras exista ese flujo y la gente tenga sus ingresos garantizados, se podría lograr una paz que no es solo la ausencia de guerra, sino la estabilidad de la gente.