La designación de Daniel Rojas cayó mal en varios sectores, en particular por su uso de palabras de alto calibre y groserías contra detractores del Ejecutivo, medios de comunicación y hasta contra la Policía, entre otros.
El ministro entrante admitió hoy que suenan mal esos mensajes en el contexto de su actual realidad, pero aseguró que se trató de respuestas suyas durante el estallido social, cuando no era funcionario y se percibía como activista juvenil.
“Se han privilegiado para la crítica algunos mensajes que en algún momento de mi vida puse en el contexto de la indignación como ciudadano, dado que no tenía ningún cargo de representación dentro del Gobierno. Estamos hablando de las épocas del estallido social en las que simplemente era un ciudadano con una vinculación al activismo social y político”, afirmó.
Aseguró que como Ministro respetará la crítica de la prensa, sin renunciar a sus principios”, pero “por supuesto utilizando el lenguaje que se debe cuando se tiene este tipo de dignidades”. Lea: Embargan bienes a funcionarios del INPEC por corrupción al interior de cárcel Modelo
Frente a las críticas de varios sectores del país que califican sus palabras no solo como groseras, sino que demuestran a una persona dominada por sus sentimientos y de pocos argumentos, Rojas señaló que esas críticas opacan el debate que él ha dado en otros asuntos y donde ha sido argumentativo.
La respuesta del ministro
“La crítica siempre tendrá que buscar los trinos más soeces que yo haya puesto en mi vida como activista y en mi vida juvenil y de indignación, pero no se ha centrado en otra clase de publicaciones en la que hemos dado todo tipo de debates”, refutó.
Recordó, a manera de ejemplo, que fue “el coordinador del diseño del programa presidencial y sobre ese programa hubo cualquier clase de debates de todo tipo, técnico y político y siempre tuvimos capacidad para argumentarlos”.
El nuevo ministro de Educación también se refirió a las críticas que señalan su poca experiencia en el sector y los problemas que esta inexperiencia le puede causar a su gestión.
“A Alejandro Gaviria y a Sergio Fajardo no podría contestarles nada porque han acudido a criticarme, porque en algún momento he utilizado groserías como cualquier persona las utiliza, pero más dirigidas a criticarme como personas y prefiero no ponerle mucha atención”, argumentó, frente a las críticas del exministro y el exalcalde.
Aunque rechazó de tajo las críticas de Gaviria y a Fajardo, aseguró que le abrirá las puertas a críticos expertos en el tema educativo como lo es Edna Bonilla, exsecretaria de educación de Bogotá. Lea también: Informe de la exministra de Educación: aumentó la cobertura del PAE
“Es de mi mayor interés reunirme con los críticos porque tienen mucho que aportarle al país y en el marco de la diferencia la educación puede ser ese gran punto nodal de acuerdo nacional y me encantaría a penas asuma el cargo invitarlos a escuchar y vincularles también en la construcción de la política pública”, afirmó.
Tras su origen desde el movimiento estudiantil, Rojas señaló que ese movimiento será importante en su gestión, siendo “activas” y los invitó a “que participen constructivamente en la toma de decisiones”, respecto de “los programas que más demandan”, en “cómo debería ser la reforma de la ley estatutaria” y cómo “debería ser una movilización participativa”.
Rojas dijo que su experiencia en la SAE en la consecución de infraestructura y terrenos será importante para cumplir con su principal reto que es abrir sedes universitarias en todo el país.