La Alianza Verde enfrenta turbulencias internas mientras se prepara para elegir a su candidato para la presidencia de la Cámara de Representantes. La intervención del presidente Gustavo Petro ha exacerbado las tensiones, posicionándose a favor de Jaime Raúl Salamanca, lo que ha desatado una serie de reacciones dentro del partido y de sus opositores.
El presidente de la República, Gustavo Petro, añadió combustible a la polémica al reunirse en la Casa de Nariño con su ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y nueve representantes a la Cámara de la Alianza Verde, encabezados por Jaime Raúl Salamanca, el candidato favorito del gobierno para la elección del 20 de julio. Cathy Juvinao, representante a la Cámara, cuestionó esta reunión, lo que llevó a un tenso intercambio con el mandatario. Lea aquí: Salamanca competirá con Miranda por la presidencia de la Cámara
Petro justificó su reunión argumentando que, como jefe de Gobierno y considerando que la Alianza Verde es un partido de gobierno, era apropiado reunirse con ellos. Juvinao, una antigua aliada convertida en opositora, replicó duramente, cuestionando la transparencia de estas reuniones y sugiriendo que el gobierno podría estar intentando influir en la elección mediante prácticas cuestionables.
Jaime Raúl Salamanca, representante por Boyacá, emergió como el candidato preferido tras una serie de negociaciones entre varios miembros de la Alianza Verde, incluyendo Marta Alfonso, Duvalier Sánchez, Santiago Osorio y Wilmer Castellanos. Salamanca se posiciona como un candidato de unidad capaz de atraer apoyo de diferentes sectores.
Katherine Miranda, otra representante de la Alianza Verde, ha expresado su preocupación por la interferencia del Ejecutivo en la elección interna del partido, subrayando la importancia de respetar la autonomía de las ramas del poder. La falta de consenso dentro de la Alianza Verde podría no solo fracturar el partido, sino también afectar la estabilidad de la coalición de gobierno en el Congreso.