Uno de los rumores de la política local es que el Pacto Histórico en Cartagena y Bolívar está fracturado. Muchas fotos de perfil abrazando a Gustavo Petro; muchos líderes con amplio recorrido social o electoral; y cierto desconocimiento sobre cómo se organizarán de cara a los comicios regionales del próximo año, son ingredientes del runrún.
Sin embargo, Liner Campo Tejedor, uno de los líderes regionales de esa coalición habló con El Universal para aclarar la situación y dar pistas de cómo se están fortaleciendo.
¿Cuál es su papel?
Fui uno de los bolivarenses que estuvo en el equipo de empalme de Gustavo Petro y Francia Márquez con el gobierno saliente. Conformé el comité del Ministerio de Defensa, invitado a ese espacio tras un amplio trabajo socialdemócrata y étnico. De Bogotá trajimos una serie de pautas y procesos para fomentar el bienestar de las comunidades de Cartagena y Bolívar. El progreso debe llegar al territorio y las brechas sociales y económicas deben acabarse.
Con esas improntas estuve como gerente de campaña de Cha Dorina Hernández para la Cámara de Representantes, proyecto que resultó exitoso y que hoy ha permitido que nuestro movimiento se posicione, obtenga un reconocimiento institucional y nacional, y tenga el valor para alcanzar sus metas en la región.
Dicen que usted es el líder en la región...
Eso es falso. Nuestra representante máxima es Dorina Hernández. Es nuestra congresista y es una persona con la integridad para liderar una coalición que es horizontal y fraternal. Yo solo he sido el relacionista político para temas sociales y que también extendió puentes con otras fuerzas políticas de la región que no apoyaron a Gustavo Petro en un comienzo, pues estuvieron con Fico Gutiérrez u otros candidatos, para que se sumaran a votar por el Pacto en segunda vuelta. Ese respaldo fue crucial para la victoria.
¿Y esa puerta sigue entreabierta para esas fuerzas?
El Pacto Histórico en Bolívar es un equipo de trabajo de seis partidos políticos y una serie de movimientos sociales, bajo el faro de Dorina Hernández Palomino. Acá lo que construimos es un proyecto a largo plazo que valora más el bienestar común y la transformación social sobre las ideologías.
En este proceso político hay un capítulo para lo que se le denomina como Frente Amplio, que es el ingreso de partidos políticos tradicionales u otras fuerzas a la consulta electoral y programática del Pacto Histórico en las regiones. Sin embargo, cabe subrayar que todo lo que se derive será bajo la sombra del Pacto.
Se habla de William Montes, Dumek Turbay y otros nombres...
Antes había muchas casas políticas en el departamento. Estaban los García, los Araújo, entre otros. En estos momentos solo hay cuatro grupos políticos que lograron elegirse: los Blel, los Montes, el grupo de Lidio García y el Pacto Histórico. En la Resolución 001 del Pacto Histórico se establece la forma cómo se establecerán los consensos, en primer momento, con los integrantes de la coalición. En otras palabras, las reglas para ponernos de acuerdo para elegir a los aspirantes a Alcaldías, Gobernaciones, Concejos, Asambleas, JAL.
Si en esos espacios de consulta interna no hay acuerdo, se abre la posibilidad, a través del Frente Amplio, emulando lo hecho por el presidente Petro para obtener una mayor gobernabilidad en el Congreso, de dialogar con otros partidos políticos que convergen hoy en la unidad nacional. Hoy es prematuro mencionar precandidatos o interesados, pues hay muchos y tienen con qué merecerlo.
Yo trabajé en la Gobernación de Dumek Turbay como director de Cobertura Educativa, un cargo al que fui invitado por mi trabajo con las comunidades y no por ser una cuota política. Por lo tanto, no hay un vínculo actual con su proceso de liderazgo que es independiente del Pacto Histórico.
¿Hay fisuras en el Pacto Histórico en Bolívar?
Estamos unidos y estamos fortaleciendo nuestro proyecto político. Esos rumores son infundados por contradictores que no hacen parte del Pacto y que tienen un interés electoral en dividir para vencer. Por eso mienten o atacan pues los liderazgos alternativos y genuinos les dañan sus cálculos políticos.
Más que cálculos electorales lo que se busca es extrapolar el trabajo nacional de Francia Márquez y Gustavo Petro a nuestra región para poder superar la pobreza extrema y que ningún habitante se acueste con hambre. En nuestra región hay tantos terrenos baldíos, que hoy son improductivos y que pueden darse en convenio a tantos campesinos para que los siembren. Es lamentable que todo ese beneficio socioeconómico se le dé la espalda.
Esos espacios, además de potenciar la agricultura, pueden convertirse en centros educativos satélites que lleven conocimiento y tecnificación al campo. Una estrategia que fácilmente la Alcaldía de Cartagena puede adelantar en la zona metropolitana y en conjunto con los municipios aledaños.
¿Cómo hacerlo?
Quitar las diferencias ideológicas de la ecuación y que haya un acuerdo integral en todos los actores capaces de traer mayor desarrollo a la región. Un proyecto basado en la educación, el turismo, la cultura, el saneamiento básico de los barrios pobres y la agricultura. Así podremos sacar adelante a muchos cartageneros que hoy sufren por la desconexión que mencioné; por ejemplo, es lamentable que en una ciudad como la nuestra no haya una Secretaría de Turismo en la Alcaldía de Cartagena.
Hablando de la Alcaldía, ¿William Dau es vital para el Pacto?
Por razones legales él no pudo ni debe involucrarse en procesos electorales, dado que es un funcionario público que no puede participar en política. Ya en la dimensión de apoyar o no al Pacto Histórico en la región, yo creo que debe es dedicarse a gobernar. Hoy es urgente recobrar la confianza de la ciudadanía por las instituciones, que hoy está perdida. Eso se logra con inversión social, fortalecer la seguridad y poner las cosas en orden. Esa es mi invitación fraternal ante las altas percepciones de inseguridad, hambre y horizonte económico que hay en Cartagena.
En los pasillos políticos de Cartagena muchos aseguran que Liner Campo será una de las cartas fuertes para ganar la Alcaldía de la ciudad, pues contaría con el apoyo de Gustavo Petro, Francia Márquez y un sector cercano a William Dau.
No obstante, el oriundo del barrio Olaya Herrera, quien se crió en Fredonia, aclaró que en estos momentos solo es un proyecto que le interesa y no cuenta con la venia de nadie, pues se espera construir, a base de consultas y consensos, la forma de elegir a los candidatos en los tarjetones de octubre de 2023.
Campo Tejedor es abogado constitucionalista, exmiembro de la JAC de Nuevo Paraíso en Las Palmeras; exfuncionario de la Presidencia de Colombia, la Alcaldía de Bogotá y en la Gobernación de Bolívar. El cartagenero es reconocido por liderar procesos etnicos y de defensa legal a afrodescendientes, organizaciones sociales y campesinos.
