Esta claro que la bandera del gobierno del alcalde William Dau es y seguirá siendo la lucha contra la corrupción. Y en su discurso durante la posesión de los concejales, el pasado 2 de enero, no perdió la oportunidad para recordar su sentir a los cabildantes, no sin antes compartir su interés por “trabajar en la misma página, por el bien de Cartagena”.
Dau aseveró que la crisis administrativa en la que estuvo sumida la ciudad por varios años “no volverá a repetirse”, explicando que durante su gobierno no se patrocinará la repartición de contratos, supuestamente orquestada entre concejales y anteriores dirigentes, por lo cual insistió en hacer a un lado los intereses particulares y trabajar por responder a los compromisos y expectativas ciudadanas.
Ahora bien, si a esto le sumamos que el recién posesionado alcalde solo cuenta con un concejal aliado oficialmente (Javier Julio Bejarano, de la coalición alternativa), sus declaraciones a tono de advertencia llevan a algunos a preguntarse cómo será la relación Alcaldía-Concejo, teniendo en cuenta que la ciudad viene de una administración (Pedrito Pereira) en donde fue claro el divorcio entre estas dos.
Sin embargo, hasta el momento ninguna de las bancadas del Concejo se declaró en oposición al gobierno Dau y aunque con algunas diferencias de intereses, los cabildantes concuerdan en que hay objetivo común, que es trabajar por Cartagena. No obstante, piden que esto no sea visto como un guiño a la actual administración, sino como un deber que hay desde ambas orillas.
En ese sentido, uno de los primeros en sentar su posición fue el concejal de la bancada de La U, César Pion, quien envió un mensaje claro y directo al nuevo gobernante, manifestando que lo que necesita Cartagena es empezar a trabajar como unidad, sin que esto sea interpretado como coqueteo político, y reconociendo las diferentes apuestas y proyectos que necesita la ciudad, pues aunque respalda el atacar la corrupción, asegura que esa no puede ser la única línea de batalla.
“Esta corporación tiene que trabajar como una unidad, hay temas en la ciudad que tienen que pasar al tema práctico, son temas urgentes como la organización de las finanzas públicas para hacer inversiones y definir actividades del PEMP y el POT. Existe una invitación para trabajar como una unidad sin que esto quiera decir que se está coqueteando políticamente o se está haciendo antesala para ser parte de un gobierno”, explica Pion.
Dejó claro que la cercanía que pueda haber entre el Alcalde y sus funcionarios pretende únicamente que los proyectos puedan estudiarse y ejecutarse de forma más articulada .
“Cartagena tiene un sin fin de problemas y lo que menos le conviene es que exista una división a nivel administrativo. Es importante que el Alcalde entienda que el Concejo no está en su contra, sino que tiene toda la intención de trabajar en beneficio de la ciudad”, dijo Pion. Así como él, varios de los integrantes de la corporación extendieron sus mensajes al alcalde, buscando pasar la página de las diferencias y buscando enfocarse en trabajar sin contratiempos.



