La sesión del lunes 18 de marzo de 2019 será recordada en la historia del Concejo de Cartagena como el día en que esta corporación quedó con solo dos curules vacías, luego de más de un año de estar sesionando con menos de 10 concejales, e incluso llegar a sesionar con siete concejales.
Esto porque, mediante la resolución 053 de la mesa directiva del Concejo de Cartagena, se reintegraron a sus curules los concejales Édgar Mendoza Saleme (Partido Conservador), Erich Piña Feliz (Partido Liberal), Américo Mendoza Quessep, (Partido ASI), Antonio Salim Guerra, (Cambio Radical); y Duvinia Torres Cohen y William Alexander Pérez Montes (del Partido de La U).
La decisión se produjo acogiendo lo resuelto por el Juzgado Décimo Segundo Penal Municipal de Cartagena con Funciones de Control de Garantías, quien los dejó en libertad por vencimiento de términos, luego de permanecer en casa por cárcel por más de 240 días, imputados por haber incurrido presuntamente en los delitos de cohecho y prevaricato, explicó el presidente del Concejo, Óscar Marín.
Todo empezó en 2017. Un escándalo inesperado salpicó a doce concejales por haber elegido, presuntamente, de forma irregular a Nubia Fontalvo como contralora en enero de 2016.
La investigación empezó a través de las interceptaciones que hizo la Fiscalía a una línea del exconcejal conservador Jorge Useche, quien tuvo medida de aseguramiento por un año en la cárcel para funcionarios públicos de Sabanalarga, pero que por vencimiento de términos ya está en libertad. La Fiscalía dice tener 71 mil registros de interceptaciones telefónicas, y en uno de los audios se le escuchó decir a Useche a otro concejal, que recibirían “32 libros y 7 libros y medio mensuales por elegir a Fontalvo como contralora”.
La Fiscalía presume que los “libros” son recursos en dinero y que en realidad se trataba de 32 millones de pesos además de dádivas en puestos por votar por Fontalvo.
Por el caso también estuvieron encarcelados la misma excontralora Fontalvo, el exalcalde Manolo Duque y su primo José Julián Vásquez, señalados de estar detrás de toda la orquestación de los delitos.
Además de los concejales que salieron libres, la Fiscalía vinculó a los concejales Luis Cassiani, quien aún permanece en casa por cárcel, y al concejal Ronald Fortich, quien recuperó su curul pero permanece con una medida restrictiva sin poder volver al Concejo. Semanas atrás también salieron libres, el concejal Lewis Montero, a quien se le desvinculó del proceso; y la concejal Angélica Hodeg.
El Concejo venía sesionando con 11 concejales. Se trata de los conservadores, Óscar Marín, Rafael Reyes, David Caballero y Rafael Meza; César Pión, de La U; Wilson Toncel y Dagoberto Macías de Cambio Radical; Lewis Montero, de Opción Ciudadana; Angélica Hodeg, de la Alianza Verde, pero sancionada por ese partido; y Javier Curi, del Partido Liberal, este último también vinculado al caso Fontalvo, pero sobre quien nunca pesó una medida.
También estuvo en ese grupo Judith Díaz de Cartagena Confirmas, pero una decisión del Consejo de Estado le devolvió la curul a Fortich y Díaz debió salir. A este panorama llegan los seis que salieron libres.
El Concejo como se percibe, ha tenido una infortunada intermitencia de miembros que entran y salen, por líos jurídicos y procesos electorales, nunca antes vistos en la ciudad. De hecho ya habían salido de la corporación los concejales Carlos Barrios y Zaith Adechine por procesos jurídicos.
Sobre la bancada liberal también recae un misterio. Tras la renuncia de David Dáger de su curul, que aunque la hizo a título personal se dio en medio de una investigación por presuntos nexos con una empresa que hizo lo exámenes para el cargo de contralor; la curul aún no ha sido ocupada.
Aunque El Universal no pudo conversar con el excandidato liberal al Concejo, Hernando Trucco, conoció de una fuente que el exconcejal adelanta una demanda contra el Concejo, por los meses en que “no ha podido ingresar al Concejo en reemplazo de Dáger”. Trucco le sigue en votos a Dáger en la lista liberal, y lo que no se explican sus asesores es si la renuncia de Dáger se produjo por su libre voluntad, y no por un lío jurídico, ¿por qué no ha podido Truco entrar en su reemplazo?”.
De entrar Fortich, Cassiani y Trucco, el Concejo volvería a sus 19 curules ocupadas.