La crisis migratoria que atraviesa América Latina, a causa del éxodo de más de 7 millones de ciudadanos y ciudadanas de Venezuela, no tiene precedentes en el continente, por lo que representado un desafío para los Gobiernos, las comunidades de acogida y por supuesto, para los propios migrantes, quienes se enfrentan a prejuicios y dificultades para rehacer su vida fuera de su territorio natal.
La migración es una oportunidad de desarrollo, siempre que podamos comprenderla y aprovechar las ventajas que nos ofrece, dejando de un lado la discriminación.
Para entender mejor este fenómeno, te presentamos cinco puntos claves que abordan desde sus causas y contexto hasta las formas en la que puede ser beneficiosa.
1. Coyuntura sociopolítica
El movimiento migratorio de la población venezolana no es fortuito, es consecuencia de la coyuntura sociopolítica que vive Venezuela y que les dificulta la permanencia en ese país.
2. No solo en Colombia
Colombia es el país con mayor recepción de población migrante venezolana, pero esto se debe a su cercanía geográfica con Venezuela. La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) explica que los países vecinos acogen hasta el 70% de los inmigrantes que salen de sus territorios, cuando hay grandes movilizaciones de ciudadanos, especialmente si son forzosas.
Según los datos de la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V), de los 7 millones 720 mil venezolanos y venezolanas que han migrado, 2 millones 88 mil están en Colombia; 1 millón 54 mil en Ecuador y 550 mil en Brasil, entre otros países de América y el mundo. También te podría interesar: “No puedo sentir más que gratitud hacia Cartagena”: testimonio de una migrante
3. Tendencia mundial
Los movimientos masivos de personas que salen de sus países de origen porque sienten amenazada su integridad es una tendencia a nivel global, causada por diversas razones políticas, sociales y económicas, por lo que el caso de Venezuela no es único.
Una situación similar ocurre con los más de 8,2 millones de personas ucranianas, quienes a raíz del conflicto Ucrania – Rusia, que completa casi dos años han migrado a países como Polonia, Alemania y República Checa, por lo que se ha denominado una de las movilizaciones más rápidas desde la Segunda Guerra Mundial.
4. Se deben garantizar los derechos fundamentales
Uno de los puntos claves para comprender la migración es tener presente que las personas migrantes mantienen sus derechos fundamentales, sin importar el lugar donde se encuentren.
5. Es una oportunidad para todos y todas
La migración es una oportunidad de desarrollo porque permite la llegada de nuevos talentos que aportan a las comunidades de acogida; hay mano de obra disponible en áreas en las que hay mucha demanda o en labores que no son parte de la vocación profesional de los territorios e incluso, con la promoción de emprendimientos, se dinamizan las economía nacional.
Además, los Estados que acogen migrantes tienen oportunidad de acceder a programas de cooperación internacional para desarrollar iniciativas, que benefician tanto a la población migrante como a la local.
Si bien la atención de las personas migrantes requiere de una inversión estatal, de acuerdo con un estudio realizado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), a largo plazo la migración podría incrementar el Producto Interno Bruto (PIB) de las naciones hasta en 4,5 puntos porcentuales.
“Se identifican beneficios importantes a mediano plazo en materia de productividad y crecimiento, consecuencia de un incremento de la fuerza laboral y un mejor alineamiento entre el capital humano de los migrantes y los puestos de trabajo”, dice el FMI. Lee también: Nuevas conexiones aéreas entre Colombia y Venezuela