Tras una nueva sesión replicando los exitosos procesos realizados en los colegios Inem y Antonio Nariño, la firma del Pacto por la Integración en la Escuela llegó a los estudiantes del barrio Arroz Barato, a través de una actividad lúdica en la que se entregaron mensajes que destacan el papel de la población migrante venezolana en el país y se explicaron las dificultades que implica migrar. También le puede interesar: Estudiantes del barrio La Esperanza se unen al Pacto por la Integración.
El Pacto por la Integración en la Escuela es una iniciativa del proyecto ‘Pa’lante, chamos y chamas’ de El Universal y Usaid que consiste en un acuerdo simbólico, firmado de manera voluntaria por actores de la comunidad educativa de Cartagena que busca incentivar el respeto y luchar contra la discriminación.
Se unieron como comunidad
Al igual que en las anteriores instituciones, los estudiantes descubrieron nuevas formas de plasmar sus ideas al hablar sobre la migración y construyeron mensajes de unión, fortaleza y resiliencia a través de pancartas, dibujos y frases como: “Somos hermanos de tierra y corazón, unidos por la diversidad y la resiliencia”; “La amistad entre nuestros países es un puente que nos une” y “Unidos somos más fuertes, apoyémonos mutuamente para transformar desafíos en triunfos”.
Juntos, estudiantes y periodistas de El Universal, compartieron sus ideas, pensamientos, talento y creatividad, en un espacio en el que predominaba el respeto, la aceptación, la diversidad, la escucha, la comprensión y, ante todo, la diversión.

Contaron sus historias
Los estudiantes tuvieron la oportunidad de contar sus historias de vida, como Jetzaly Rivera, estudiante venezolana de 17 años, quien, entre lágrimas, comentó: “La adaptación al país me costó mucho, porque no tenía a mi familia acompañándome”. Después de un par de minutos, y aún afectada por la situación, finalizó: “Todavía los extraño mucho”.
“Todos somos hermanos y por eso debemos ayudarnos, unirnos y aceptarnos” comentó Eduardo Rodríguez, estudiante venezolano de octavo grado, quien aprovechó el espacio para hacer un llamado a la unión y a la aceptación de la población migrante venezolana, intentando que todos sus compañeros colombianos dejaran de lado sus prejuicios, pensaran de manera diferente, les brindaran apoyo y se unieran como una sola comunidad.

Se comprometieron con la integración
Los estudiantes firmaron voluntariamente el pacto y se comprometieron con los cinco puntos que se promueven en el proyecto: abrazar lo que me une a los demás y respetar las diferencias; eliminar la discriminación y los prejuicios hacia la población migrante venezolana; accionar día a día la cohesión social; comunicar mensajes de integración y unidad; e incentivar la equidad de género.
El Pacto por la Integración en la Escuela llegará a la mayor cantidad posible de estudiantes y miembros de la comunidad educativa en Cartagena, creando conciencia sobre la importancia del respeto y de la unión en el desarrollo social. Lee también: ¡Vamos ‘Pa’lante, chamos y chamas’!