Los Premios Excelencia El Universal, celebrados este 30 de julio, no fueron configurados para ser una premiación más. Fueron concebidos como un acto de reconocimiento a lo mejor de nosotros mismos, los cartageneros y bolivarenses, como el espejo en el que queremos vernos reflejados como sociedad; una sociedad que necesita esperanza, referentes, y también valentía moral para sostener lo correcto.
Desde esta iniciativa, que esperamos que perdure, El Universal no solo premia sino que proyecta un ideal; por eso creemos firmemente que debería repetirse, expandirse, hacerse costumbre, como otra fuente que nutra a Cartagena y a Colombia, de inspiración, ejemplo y dirección.
Construimos un “nosotros” en una Cartagena llena de belleza, de historia, de lucha; Cartagena de Indias, que no se entrega a la resignación, sino que resiste, persiste y transforma, porque esta ciudad será lo que nosotros decidamos que sea; porque tenemos el talento, la identidad y, sobre todo, los valores para construir juntos una nueva etapa: una Cartagena que no sea solo postal, sino también proyecto colectivo.
Pero lo primero que tenemos que hacer para avanzar y creer en nosotros mismos es generar confianza. Hablamos de muchas crisis en muchos frentes, pero entre todas las crisis que tenemos, la mayor crisis es de confianza y credibilidad. Aquí tenemos que hacer un esfuerzo mayor para lograr la confianza y la credibilidad que nos den bases sólidas para prosperar prontamente como sociedad cohesionada, justa, equitativa, incluyente y productiva.
Reiteramos nuestro agradecimiento al jurado, de lujo, que se ofició para seleccionar a los ganadores. También gracias a nuestros patrocinadores y a cada uno de quienes concurrieron a la ceremonia y a quienes la siguieron a través de nuestras redes.
Felicitaciones a los finalistas y a los ganadores, quienes dieron mensajes aleccionadores sobre cómo han logrado liderar sus organizaciones y talentos de quienes las conforman, inspirándonos con sus testimonios.
También gracias a Carlos Raúl Yepes, nuestro invitado especial, líder de reconocida prestancia intelectual, profesional y moral, quien compartió con desprendimiento varias de sus exitosas experiencias, resaltando la importancia de los valores humanos en todo lo que se emprende.
Precisamente, de su discurso surgieron tres ideas que posteriormente nos ha deferido más específicamente, tan importantes para este momento de ciudad en el que confluyen casi que todas las esferas sociales con una misma mirada dirigida a sacarla adelante, cada quien desde el rol que juega.
En el editorial de mañana desarrollaremos estas tres ideas, propuestas por Carlos Raúl, que esperamos sean acogidas por la administración distrital y las distintas fuerzas cívicas, sociales, comunitarias y empresariales que conforman La Fantástica.