Interesante movida la del alcalde de Cartagena con el representante de Estados Unidos en Colombia, el embajador encargado, John McNamara, quienes la semana pasada se comprometieron a reforzar la cooperación binacional en temas claves como la lucha contra la trata de personas, el fortalecimiento del turismo, la seguridad integral y el fomento del bilingüismo en comunidades vulnerables.
No es usual que el más alto vocero de una nación extranjera celebre los logros de una administración local en particular y sea tan expresivo en torno de los alcances de esta. Y es aún más interesante teniendo en cuenta que se trata del representante del principal socio comercial del país, con el cual no se está en el mejor momento de las relaciones binacionales por una visión confusa o inestable del Gobierno central, en relación con el gobierno de Estados Unidos y viceversa.
Pero el asunto es más relevante si se considera que, durante la reunión entre el alcalde Turbay y el encargado de Negocios de la Embajada de EE. UU., este mostró interés por la Liga de Gobernantes del Caribe, plataforma que nació como respuesta a la falta de representación de los entes territoriales del norte del país en agremiaciones nacionales, de la cual la mayoría de los mandatarios del Caribe ya se ha sumado, a la cual fue invitado el embajador McNamara en su próxima reunión, programada para el 19 de junio en Sincelejo, a la que también se espera la asistencia de representantes del Gobierno nacional.
Es curioso todo lo que está pasando por cuenta de la falta de interés del Ejecutivo en los asuntos a cargo de los mandatarios regionales, singularmente de aquellos que fueron elegidos sin contar con los apoyos de los partidos y movimientos cercanos al Palacio de Nariño, como es el caso del actual alcalde de Cartagena.
Por supuesto que hay que aprovechar el renovado interés de la Embajada de EE. UU. en temas que expresamente mencionó el embajador Mcnamara, como la educación y el bilingüismo en la ciudad, mediante el respaldo a programas educativos dirigidos a niños, jóvenes y adultos de sectores populares, a través del programa ‘Centros Binacionales’, que se desarrollará en colaboración con el Centro Colombo Americano y Unicolombo, iniciativa que permitirá la enseñanza del inglés desde los 6 años hasta adultos mayores, con profesores estadounidenses y de la ciudad, lo cual dinamizará el empleo local en el sector turístico.
En similar sentido se valora el compromiso de la continuidad y profundización en la indispensable lucha contra la trata de personas, que tanto padece Cartagena por su condición de ciudad-puerto, asunto en el cual el gobierno de EE. UU. es un natural aliado estratégico en vista del creciente turismo proveniente de ese país, y de las poderosas redes de proxenetismo, de pederastas y de narcotráfico que se entrelazan en ambas naciones.