El Concejo Distrital está estudiando el presupuesto 2026, que asciende a más de 4,5 billones de pesos. De este total, cerca de 2 billones son recursos de libre destinación, generados gracias al pago de impuestos locales como el predial y de industria y comercio.
Aplaudimos el esfuerzo fiscal y la priorización social de este gobierno, celebrando la inversión histórica en educación. Con un presupuesto cercano a los $250 mil millones, se atiende una solicitud constante del empresariado. Sin embargo, este buen camino exige herramientas creativas que maximicen el impacto de cada peso invertido.
Sabemos que las necesidades de la ciudad sobrepasan con creces los recursos disponibles. Por ello la urgencia de aumentar la eficiencia en el recaudo y el gasto. Resulta incomprensible, en este contexto de búsqueda de eficiencia, la omisión de un mecanismo que ya ha demostrado ser exitoso a nivel nacional y que a nivel local, fue aprobado por el Concejo y luego reglamentado mediante decreto.
Obras por Impuestos distritales es la versión más innovadora de los presupuestos participativos. Este mecanismo permite que el contribuyente decida en qué se invierte parte de sus impuestos, siguiendo las pautas del Plan de Desarrollo. Así, el empresario asume voluntariamente la responsabilidad de entregar una obra pública, en lugar de solo pagar el impuesto. No es un beneficio tributario, es otra forma de pagar, demostrando un compromiso mayor con el desarrollo social.
Al dejar este mecanismo por fuera del presupuesto 2026, la Administración está frenando una oportunidad para acelerar la inversión en obras sociales que la ciudadanía reclama hace décadas. El mecanismo garantiza una ejecución más ágil, y con altos estándares de calidad. Es un puente directo entre los impuestos de las empresas y los requerimientos ciudadanos más sentidos. La empresa puede inyectar recursos en las comunidades, articulando este compromiso con sus programas de responsabilidad social, multiplicando el beneficio para la comunidad.
La falta de inclusión de un rubro específico ha generado incertidumbre en los contribuyentes, pues no es clara la envergadura de los proyectos a presentar. Reiteramos la solicitud a la Secretaría de Hacienda para que modifique el proyecto de presupuesto, incluyendo un rubro “Sin Situación de Fondo” para Obras por Impuestos. Como representantes de las empresas que aportan el 44% del ICA de Cartagena, pedimos que nos permitan trabajar de la mano con las comunidades, dejando parte de estos impuestos en las zonas que claman por atención. Cartagena está a tiempo de ser la primera ciudad en Colombia en implementar este mecanismo a nivel Distrital. Esperamos que la Administración y el Concejo sean protagonistas de esta historia.
*Gerente ANDI Seccional Bolívar.

