Qué nos deparará el 2026

En medio del trabalenguas de partidos políticos en cabeza de sus representantes, bien vale la pena hacernos un lavado de oídos para asimilar lo que debemos masticar en medio de las disputas entre unos y otros, sin entender bien y de manera objetiva, hacia dónde nos quieren llevar los discursos de cada cual, porque las propuestas ni se vislumbran y si se presentaran en estos momentos, quedarían en el papel y lápiz, como sucede cuatrienio a cuatrienio y hacia dónde queremos ir o, por lo menos, entender qué nos deparará. Apelle, figlio di Apollo/Fece una palla di pelle di pollo/Tutti i pesci vennero a galla/Per vedere la palla di pelle di pollo/Fatta da Apelle figlio di Apollo. Desde niña escuchaba a mamá enseñarnos este trabalenguas, parece enredado por estar en otra lengua, sin embargo, en español significa “Apeles, hijo de Apolo, /hizo una bola con piel de pollo. /Todos los peces/subieron a la superficie/para ver la bola de piel de pollo/hecha por Apeles, /hijo de Apolo”. Y todo tiene un sentido actual, me recuerda las bolas de trapos que mamá les hacía a mis hermanos para que jugaran con sus amigos al béisbol, enrollaba y enrollaba tiras de tela compactándolas y después se amarraban con varias vueltas de hilo, era una proeza artesanal que propiciaba una herramienta para el desarrollo de sus hijos, estimulando el ejercicio físico con disciplina a través del deporte. Aquí encuentro un buen argumento para comprimir trapos y hacer una bola, por eso, pienso en cada ciudadano y me incluyo en los que no solamente nos cogen de trapos y nos ponen a trapear de un lado a otro, dejándonos a merced del capricho y voluntad de los que dicen “Voten por mí, los defenderé y haré un país más justo, con educación, trabajo, salud, vivienda, seguridad”, ping pong, sino que nos dejan en el limbo a la intemperie, en la inseguridad por el caos y barbarie de todos los grupos que han querido apropiarse del territorio para hacer lo que quieren con su autonombramiento de Jefes con el fierro en mano. Divago, busco cuáles son los requisitos necesarios para ser candidato a la Presidencia o Vicepresidencia de Colombia y me encuentro, entre otros, con… “Además, la trayectoria política que tenga el aspirante tendrá un rol fundamental, ya que de esto dependerá ser reconocido por los ciudadanos y el poder obtener la cantidad de votos suficientes para ser elegido, aunque no exista una experiencia definida específicamente para ser elegido”. Si todo esto es cierto y a su vez muchos de tantos aspirantes son conocidos por la ciudadanía como acreedores de grandes entuertos, abusos de poder y líos con la justicia, por reputación dudosa, ¿por qué siguen perpetuados en el poder y siguen batallando a pesar de su ética maquillada por ganarse el título de presidente de Colombia? Salgamos a la superficie: no somos bolas de trapos, somos carne y huesos y materia gris.