comscore
Columna

Dos muertes que exigen respuestas en Cartagena

“La ciudadanía espera explicaciones de fondo sobre lo que falló, hoy tiene a dos familias en luto y no puede repetirse en ninguna otra obra pública”.

Tatiana Velasquez

Compartir

Dos obreros murieron sepultados, el sábado, durante una excavación para instalar redes de alcantarillado en Cartagena. Desde entonces, han circulado versiones sobre posibles fallas de seguridad laboral. “Trabajan a destajo y sin ARL ni EPS. Todo el que trabaje allí debe tener su Sisbén”, se lee en una de las cadenas que circula desde entonces.

La Alcaldía, a través de dos comunicados, anunció investigaciones de fondo. Consultada por La Contratopedia Caribe sobre los señalamientos por posible falta de afiliación a EPS o ARL de los obreros, la Oficina de Prensa manifestó que ese aspecto también será indagado dentro del proceso para establecer “causas y responsabilidades”.

Lo ocurrido no fue un accidente menor. Hacia las 9:00 a.m. del sábado, parte del terreno cedió en un barrio del suroccidente, mientras tres trabajadores excavaban con maquinaria pesada. Dos de ellos murieron sepultados y el rescate de sus cuerpos tomó casi ocho horas y media. El primero fue extraído a las 2:47 p.m.; el segundo, a las 5:19 p.m. En esa labor participaron equipos del Distrito, Defensa Civil, Cruz Roja y Armada Nacional.

En excavaciones de este tipo, evitar los derrumbes es un imperativo, me explicó un ingeniero con décadas de experiencia en obras públicas. Para lograrlo existen distintas técnicas. Una de ellas es el tablestacado, que consiste en instalar estibas para evitar el colapso de las paredes de tierra. Otra opción son las láminas de acero, que también sirven para contener el peso del terreno. Ambas técnicas permiten mantener la excavación despejada para la instalación de las redes de alcantarillado y son especialmente necesarias cuando el suelo tiene poca estabilidad, pues el riesgo de derrumbe es mayor.

El contratista que deberá explicar lo sucedido es la Unión Temporal SLG 23, integrada por tres empresas: Socing SAS, de Arjona, con el 70% de participación; Grancolombiana de Infraestructura y Construcciones SAS, de Barranquilla, con el 20%, y LST Ingeniería SAS, de Cartagena, con el 10% restante.

Ese contrato, financiado con Regalías, lo adjudicó el gobierno de William Dau en noviembre de 2023, con una ejecución proyectada a 12 meses. La obra no estuvo lista el año pasado y el contratista le ha pedido dos prórrogas a la administración de Dumek Turbay, que la heredó. El contrato está vigente hasta septiembre y, tras una adición por $4.694 millones, su monto total es de $14.156 millones. A febrero pasado llevaba 89% de ejecución.

La obra ha tenido retrasos, entre otras razones, por la oposición de la comunidad a la construcción del colector principal en el barrio Villa Rosa.

El alcalde Turbay lamentó las muertes y anunció acompañamiento distrital a los seres queridos de las víctimas. La Alcaldía también informó que continuarán las labores de estabilización para evitar nuevos derrumbes. Más allá de los anuncios, la ciudadanía espera explicaciones de fondo sobre lo que falló, hoy tiene a dos familias en luto y no puede repetirse en ninguna otra obra pública.

*Cofundadora de La Contratopedia Caribe.

Únete a nuestro canal de WhatsApp
Reciba noticias de EU en Google News