El desarrollo de la comunidad no se refiere a las obras de concreto como pavimentación de calles, relimpia de cuerpos de agua, construcción de túneles, etc. “El desarrollo de la comunidad es un proceso de organización y educación de los grupos sociales, que tiende a generar cambios cualitativos, cuantitativos, globales y continuos que contribuyan al mejoramiento de la población”.
Para efectos de la Ley 743 de 2002, “acción comunal es una expresión social organizada, autónoma y solidaria de la sociedad civil, cuyo propósito es promover un desarrollo integral, sostenible y sustentable construido a partir del ejercicio de la democracia participativa en la gestión del desarrollo de la comunidad. La junta de acción comunal es una organización cívica, social y comunitaria de gestión social, sin ánimo de lucro, de naturaleza solidaria, con personería jurídica y patrimonio propio, integrada voluntariamente por los residentes de un lugar que aúnan esfuerzos y recursos para procurar un desarrollo integral, sostenible y sustentable con fundamento en el ejercicio de la democracia participativa”.
Es importante leer, analizar e interpretar la Ley, toda vez que este análisis permite evidenciar los grandes problemas que en la actualidad enfrentan tales organizaciones, en lo que respecta al desconocimiento por parte de afiliados y dignatarios, quienes no tienen claras las definiciones, conceptos, principios, funciones, estructuras, alcances, etc. Así mismo, se requiere que estas expresiones de la sociedad civil organizada, sean fuertes para que los gobiernos no las sigan viendo como los instrumentos de legitimación de las improvisaciones de la cosa pública y de repartición del erario; sino como el instrumento para construir desarrollo y tejido humano sostenible. Los próximos gobiernos locales y regionales deben implementar políticas y estrategias de adopción de las normas, las cuales apunten verdaderamente a fortalecer dichas organizaciones.
Cabe analizar también el nivel de cumplimiento de facultades y responsabilidades otorgadas por la Ley a las entidades que ejercen la inspección, control y vigilancia en nuestro Distrito, pues en la medida en que ejerzan tales obligaciones veremos la cohesión y fortalecimiento de nuestros organismos comunales.
No me cansaré de pedirle a los comunales de esta ciudad mayor compromiso a la hora de elegir a los gobernantes, toda vez que necesitamos coadministradores que representen los intereses de estas expresiones y organizaciones, ejecutivos responsables con los principios y normas que las amparan y unos dignatarios contribuyendo y aportando a sus asambleas y no a la casas políticas.
*Rotaremos este espacio para mayor variedad de opiniones.anianomorales@hotmail.com