Un video captó el momento en que agentes del Servicio Secreto llevaron al expresidente Donald Trump a un hospital de Pensilvania, en Estados Unidos, después de que le dispararan durante un intento de asesinato el sábado pasado.
Se puede ver a las fuerzas del orden luchando por asegurar la entrada principal del Butler Memorial Hospital mientras ciudadanos frenéticos se presionan contra el vidrio para ver al expresidente, quien recibió un impacto de bala en la oreja durante su mitin en Pensilvania. Lea: Atacante de Trump fue visto por el Servicio Secreto 20 minutos antes de que disparara
“Acaban de dispararle al presidente Trump… y lo trajeron aquí rápidamente”, dijo Rick Foerster, el hombre detrás de la cámara.
Se puede escuchar a una mujer llorando de fondo antes de que los agentes sacaran a Trump de una camioneta y lo atravesaran por una puerta de emergencia.
“Él caminaba solo y me emocioné porque esperaba que estuviera muerto o que lo estuvieran cargando”, dijo Foerster a Fox News el pasado miércoles.
El ferviente partidario de Trump dijo que la caravana de vehículos todoterreno llegó al estacionamiento del hospital apenas seis minutos después de que quienes estaban en la sala de espera vieran al expresidente recibir un disparo de un hombre armado durante el mitin de campaña televisado.
El tirador Thomas Matthew Crooks, de 20 años, le rozó la oreja a Trump y mató a un miembro del público. Otros dos asistentes al mitin resultaron heridos en el tiroteo. Lea: Joven que atentó contra Trump también buscó sobre Biden, ¿Era otro objetivo?
Irónicamente, Foerster tenía un asiento en primera fila para la manifestación y habría presenciado el caos de primera man), pero tuvo que renunciar a sus entradas VIP cuando su esposa empezó a sentirse enferma unos 90 minutos antes de que empezaran a volar las balas.
Caos en el hospital
“No había nada entre nosotros y el escenario, excepto una barrera de metal”, comentó a Fox News. “Estoy literalmente a 15 pies del podio”, anotó.
La pareja llegó al recinto ferial de Butler a las 9:00 a.m. para asegurar sus asientos y soportó un calor de 97 grados sin sombra. Su esposa, Karen, fue llevada al hospital alrededor de las 4:30 p.m. cuando comenzó a sufrir de deshidratación.
Foerster continuó observando la manifestación desde el interior del hospital y vio a Trump caer antes de que agentes del Servicio Secreto lo sacaran del escenario.
También estaba hablando por teléfono con un amigo que estaba en la manifestación, quien le dijo: “Dios mío, le dispararon al presidente Trump”.
La enfermera a cargo “estaba llorando” y otra señora se cayó de su silla de ruedas ante el anuncio. “Estaba muy angustiado y probablemente pasaron seis minutos y escuchamos estas sirenas fuertes”, dijo Foerster a Fox News. “Mi esposa me mira y me dice que lo van a traer a Trump aquí ya que estamos a sólo 10 minutos, pero a seis millas de distancia”, indicó.
Fue entonces cuando la multitud corrió hacia las ventanas y vio al candidato presidencial entrar, un momento histórico que Foerster capturó en video.
El motivo de Crooks para el intento de asesinato sigue sin estar claro.