Estados Unidos continúa endureciendo sus políticas migratorias con la entrada en vigor de un nuevo control obligatorio para extranjeros que ingresen o salgan del país. La medida comenzará a aplicarse desde el viernes 26 de diciembre, como parte de una normativa emitida por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
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El UniversalEste nuevo reglamento busca fortalecer el sistema de verificación de identidad en las fronteras estadounidenses y hace parte de una serie de acciones administrativas impulsadas por el gobierno del presidente Donald Trump, enfocadas en reforzar la seguridad nacional y el control de movilidad internacional.
La normativa fue oficializada tras la publicación de la regla denominada “Collection of Biometric Data from Aliens Upon Entry to and Departure from the United States”, la cual establece la recolección obligatoria de datos biométricos para todos los viajeros que no sean ciudadanos estadounidenses. Lee también: Esto pagará EE. UU. a los migrantes que se autodeporten antes de fin de año.
Qué datos se recolectarán y dónde se aplicará la medida
A partir de la fecha establecida, los extranjeros deberán permitir la captura de fotografías faciales, huellas dactilares y otros identificadores biométricos al momento de ingresar o salir del territorio estadounidense. Estos controles se realizarán en pasos fronterizos terrestres, puertos marítimos y aeropuertos, tanto internacionales como nacionales.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), entidad adscrita al DHS, será la encargada de ejecutar estos procedimientos en los puntos de entrada y salida autorizados.
Uno de los cambios más significativos es que el nuevo reglamento elimina las excepciones que existían anteriormente, incluyendo a diplomáticos y ciudadanos canadienses, quienes antes estaban exentos de este tipo de controles. Además, la medida deja de ser un programa piloto y pasa a implementarse de manera permanente y a gran escala.
Con esta normativa, Estados Unidos busca tener un mayor control sobre los flujos migratorios y reforzar los mecanismos de identificación de quienes transitan por su territorio, en un contexto de creciente vigilancia y seguridad fronteriza. Lee también: Donald Trump cancela 85.000 visas y afecta a 8.000 estudiantes.
