Este miércoles, 10 de diciembre, el Gobierno del presidente Donald Trump presentó una propuesta que exigiría a los turistas de 42 países, amparados por el programa de exención de visa, entregar el historial de sus redes sociales de los últimos cinco años como requisito para ingresar a Estados Unidos.
La iniciativa, encabezada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), busca reforzar el control sobre los viajeros que ingresan al país mediante el Sistema Electrónico de Autorización de Viaje (ESTA), que permite estancias de hasta 90 días sin visa.
Consultado por la prensa sobre el impacto de esta medida en el turismo, Trump aseguró que a Estados Unidos “le está yendo muy bien” y justificó el plan como una acción para proteger la seguridad nacional.
“Solo queremos que la gente venga aquí y esté segura… Queremos asegurarnos de no permitir que las personas equivocadas entren en nuestro país”, dijo el mandatario desde la Casa Blanca.

Nuevos requisitos para solicitra la visa: teléfonos, correos y contactos familiares
De acuerdo con la propuesta publicada en el Registro Federal, el Gobierno busca ampliar la información que se recoge de los visitantes que viajan bajo el programa, que incluye a ciudadanos del Reino Unido, Irlanda, Francia, Japón, Australia, Nueva Zelanda, Israel y Qatar, entre otros.
Además del historial de redes sociales, los viajeros tendrían que entregar:
- Números de teléfono y correos electrónicos utilizados en los últimos diez años.
- Información familiar, como nombres y fechas de nacimiento de sus padres y otros parientes.
El plan también contempla el lanzamiento de una herramienta móvil para que los extranjeros registren su salida del país.
Justificación y posibles efectos en el turismo tras nuevos requisitos para pedir la visa
La CBP argumenta que la propuesta responde a una orden ejecutiva emitida por Trump en enero, destinada a reforzar la protección de Estados Unidos contra terroristas extranjeros y otras amenazas a la seguridad nacional.
Sin embargo, la medida podría representar un nuevo obstáculo para los turistas, especialmente de cara al Mundial de 2026, que atraerá a miles de visitantes de países cobijados por el programa ESTA.
El público tendrá la oportunidad de enviar comentarios sobre la propuesta antes de que sea analizada para su aprobación definitiva.
