La tensión entre Estados Unidos y Venezuela crece tras el aviso emitido por la Administración Federal de Aviación (FAA) a los vuelos comerciales que sobrevuelen en el país caribeño.
El aviso de esa entidad estadounidense es a “extremar la precaución” ante lo que considera “una situación potencialmente peligrosa en la región”, aviso que coincide con el nutrido despliegue militar de Washington en la zona para presionar al Gobierno de Nicolás Maduro.
El llamado de la FAA a los vuelos comerciales
La FAA emitió una comunicación en la que advirtió “sobre una situación potencialmente peligrosa en la región de información de vuelo de Maiquetía”, que corresponde al espacio aéreo controlado por Venezuela, que incluye también parte del Caribe sur y oriental.
“Se recomienda a los operadores extremar la precaución al operar en la región de información de vuelo de Maiquetía a todas las altitudes debido al deterioro de la situación de seguridad y al aumento de la actividad militar en Venezuela o sus alrededores”, explica el texto.
“Las amenazas podrían representar un riesgo potencial para las aeronaves a todas las altitudes, incluyendo durante el sobrevuelo, las fases de llegada y salida del vuelo”, añade el escrito, que considera que el riesgo afecta también a los aeropuertos y a las aeronaves en tierra en la mencionada región.
Ante esta situación, el espacio aéreo venezolano durante esta noche de viernes luce desolado tras la alerta de EE. UU. por amenazas y actividad militar en ese país.

El aviso emitido por la FAA se produce después de que la semana pasada llegara al sur del Caribe el USS Gerald Ford, el mayor y más sofisticado portaaviones de EE.UU., para sumarse al gran despliegue militar que el Pentágono mantiene en la región desde el verano.
Washington sostiene que el contingente busca combatir el narcotráfico y asegura que el Gobierno de Maduro, al que considera presidente ilegítimo de Venezuela, es parte integral del tráfico de drogas en la región.
En el marco de este operativo EE.UU. ha destruido cerca de una veintena de lanchas al parecer cargadas con drogas tanto en el Caribe como el Pacífico, provocando la muerte de al menos 83 de sus ocupantes.

