De incalculable valor, así califican las joyas que fueron robadas del Museo del Louvre en París, Francia, hace pocas horas. Para muchos fue un asalto de película, para otros, un simple problema de seguridad que otros supieron usar.
El museo fue asaltado domingo por la mañana y no dejó heridos. En un mensaje en su cuenta de X, la ministra francesa de Cultura, Rachida Dati señaló que el robo se ha producido en el momento de la apertura del Louvre. Lea: Robo millonario en museo del Louvre: se llevaron joyas de Napoleón Bonaparte
Según los primeros elementos filtrados a la prensa, lo ocurrido hacia las 9.45 de la mañana hora francesa, (1:45 a.m. en Colombia). Los ladrones sustrajeron joyas valiosas que usaron el emperador Napoléon Bonaparte y la emperatriz Eugenia. El valor de los objetos robados no se han estimado.

Así entraron al importante museo de Francia y robaron
BFMTV contó que un grupo de hombres llegó en moto al lado del Louvre que está junto al río Sena, y donde se estaban realizando obras, y utilizaron un montacargas para subir hasta la primera planta y romper las ventanas, lo que les permitió penetrar en el interior.
El ministro francés del Interior, Laurent Núnez indicó que en solo siete minutos fueron extraídas unas joyas. No quiso precisar cuáles son las joyas sustraídas, más allá de que estaban en la galería Apolo, pero Le Parisien indicó que fueron nueve piezas de la colección de joyas de Napoleón y de la colección de los reyes franceses, incluidos un collar, una diadema y un broche.
El titular de Interior insistió en que los ladrones “actuaron muy muy rápido”, pero también en que las fuerzas del orden acudieron “inmediatamente”, que están movilizadas y que en este tipo de sucesos su nivel de éxito es superior al 50 %.
Entre los elementos hurtados está el broche de lazo de la emperatriz Eugenia, fabricado en 1855 por el joyero francés Alfred Bapst con diamantes de las Joyas de la Corona Francesa. Inicialmente, fue concebido como hebilla para un cinturón de diamantes, pero posteriormente la emperatriz lo rediseñó para convertirlo en un adorno más grande, con borlas.
También se llevaron la diadema de la emperatriz Eugenia. Fabricada en 1853 por el joyero Alexandre-Gabriel Lemonnier como regalo de bodas. Está compuesta por 212 perlas y 1998 diamantes. Las joyas provenían del Tesoro Público Francés y anteriormente habían pertenecido a la Emperatriz María Luisa y a la Duquesa de Angulema.
El collar y los pendientes del arreglo de esmeraldas de la emperatriz María Luisa. El arreglo fue un regalo de bodas que Napoleón I le regaló a María Luisa en 1810. El conjunto fue fabricado originalmente por la firma francesa Nitot et Fils, que posteriormente se convertiría en la Casa Chaumet.
Una tiara, un collar y un pendiente del conjunto de zafiros que pertenecieron a la reina María Amelia y a la reina Hortensia. La diadema, el collar y los pendientes del arreglo de zafiros y diamantes de la reina María Amelia.
Los ladrones también se llevaron la corona de la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III, pero fue encontrada dañada cerca del Museo del Louvre. La pieza histórica, que se estima tiene 1.354 diamantes y 56 esmeraldas, fue recuperada, siendo hasta ahora la única de las joyas robadas que se ha encontrado.