El Gobierno Ruso advirtió, previo a la reunión en la Casa Blanca entre los presidentes de Estados Unidos Donald Trump y de Ucrania, Volodímir Zelenski, que el envío de misiles estadounidenses Tomahawk a Kiev, daría inicio a un “nuevo nivel de escalada” en la guerra.
“Todo el tiempo figura el tema Tomahawk. Esto sería un paso significativo de cara a un nuevo nivel de escalada”, dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, a los medios de comunicación rusos. Resaltando que la postura rusa al respecto es “muy clara y bien conocida tanto en Washington como en Kiev”. Le podría interesar: Escala la guerra: Ucrania recibirá misiles Tomahawk desde Estados Unidos
Rusia sostiene el peligro que suponen para la seguridad nacional los misiles Tomahawk con los que Ucrania atacar Moscú. Peskov también subrayó que el ejército ucraniano no podría seguir atacando la infraestructura energética rusa “sin la participación de los servicios secretos occidentales” y mencionó al Reino Unido.
“La dificultad de esos intentos indica que los ucranianos no podrían haberlo hecho por si mismos”, señaló. Según reveló el diario ‘Financial Times’, la administración de Trump ayuda desde julio a Ucrania en los ataques contra refinerías y fábricas militares rusas con información de inteligencia y planificación.
Trump sugirió esta semana la posibilidad de una futura entrega a Ucrania de misiles Tomahawk, lo que se ha interpretado como un nuevo giro en la estrategia de la Casa Blanca para incrementar la presión sobre el presidente ruso, Vladímir Putin.
El nuevo plan de Zelenski contra Rusia
Al mismo tiempo, anoche aseguró que Kiev se plantea lanzar una ofensiva y que EE.UU. tendrá que tomar una decisión al respecto. “Todo lo que queremos de Putin es esto: deje de matar ucranianos y rusos, ya que está matando a muchos rusos”, dijo y volvió a poner en duda la fortaleza de la “maquinaria de guerra” rusa. Lea también: Trump revela que desplegó submarinos nucleares frente a Rusia por “amenaza”
Zelenski, presentará a Trump una nueva estrategia para presionar a Rusia, que se basará principalmente en el refuerzo del potencial de armamento de largo alcance de Kiev. “Menos palabras y más capacidad de ataque de larga distancia. Después de que Rusia saboteara el proceso diplomático iniciado por el presidente Donald Trump, la Casa Blanca está buscando una nueva vía a la paz”, escribió en X el asesor presidencial ucraniano, Mijailo Podoliak.

