La vida de Cielo, una perrita que vagaba por las calles de La Plata, Argentina, parecía condenada al abandono y al dolor. Ciega y enferma, buscaba comida entre la basura para sobrevivir, pero su historia dio un giro inesperado gracias a la solidaridad de Claudio Cocimano y Tatiana Garro, quienes convirtieron su hogar en un refugio de tránsito para animales rescatados.
Claudio recuerda que la primera vez que vio a Cielo, la escena lo marcó para siempre: “La encontramos comiendo en un basural. Con mi novia nos miramos y dijimos: no podemos seguir de largo”. Sin embargo, acercarse a ella era imposible, ya que la perra había perdido la confianza en los humanos tras una vida de maltratos.
Un vecino de la zona advirtió entonces la gravedad de la situación: “Me dijo que si podíamos nos la lleváramos, porque allí le tiraban agua caliente para espantarla”. Pese a los intentos, el rescate no pudo concretarse ese día. Pasaron tres meses hasta que Claudio y Tatiana volvieron a encontrarla y, con paciencia y gestos amables, lograron ganarse su confianza. Ese fue el inicio de su transformación. Lea: Polémica: salvaron a perrito desnutrido y los demandan por invadir propiedad

La enfermedad de Cielo, perrita callejera viral
Cielo sufría ehrlichia canis, una enfermedad transmitida por garrapatas que compromete la sangre y provoca anemia, pérdida de peso, fiebre y, en casos graves, daños neurológicos y oculares. Sus ojos azules ya reflejaban el daño irreversible: la ceguera era consecuencia de la infección avanzada y de la desnutrición que la debilitaba día a día.
El diagnóstico fue determinante para comprender por qué su supervivencia en la calle estaba casi condenada. Sin visión y en estado frágil, las probabilidades de que resistiera por sí sola eran mínimas.
Una vez instalada en La Bachimanada, el hogar de tránsito creado por Claudio y Tatiana, comenzó la recuperación. El proceso fue lento y exigió paciencia. “Para mí un momento mágico fue cuando recibió su primera caricia. Ella no veía, pero ya sentía mi olor y sabía que acá nadie la iba a castigar”, relató Claudio.
El cambio fue radical: de la desconfianza inicial pasó a buscar cariño, jugar y pedir caricias constantemente. “La resiliencia que tuvo es increíble. Antes quería morder, ahora solo quiere amar”, explicó Cocimano.
Aunque aún sigue en tratamiento, la meta es que en el futuro pueda ser adoptada por una familia definitiva que le brinde el amor y cuidado que merece.
La historia de Cielo se vuelve viral en redes
La historia de Cielo es solo una de muchas. En la casa de Claudio y Tatiana conviven actualmente más de 28 perros y 2 gatos, todos rescatados de la calle. A través de su cuenta de Instagram, @labachimanada, que ya supera los 730 mil seguidores, comparten los procesos de recuperación de cada animal.
El caso de Cielo se volvió viral y conmovió a miles de personas en redes sociales, que dejaron mensajes de aliento y gratitud hacia Claudio y Tatiana. “Por estas historias creo que ustedes son seres celestiales. Tienen magia y logran cambiar el mundo de estas garritas”, escribió una usuaria. Lea: Así sobrevivieron hombre y su perrita en naufragio durante casi 3 meses
Claudio resume la enseñanza que le dejó esta experiencia: “Cielo me transmite ternura. Me recuerda que, aunque la vida te castigue, el amor siempre debe ganar. Ellos me enseñan a creer en el amor verdadero, que no hay tiempo para odiar. En su poco tiempo de vida, los perros aman lo más posible con ese corazón enorme que tienen”.