Tras la conmoción por el asesinato de los artistas colombianos B-King y DJ Regio Clown, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó públicamente haber tenido vínculos con el extinto grupo guerrillero M-19, tal como insinuó el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en un mensaje publicado en la red social X.
La polémica surgió cuando Petro escribió en su cuenta de X:
“Le solicito a la presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, Claudia Sheinbaum, mi amiga y compañera de lucha desde el M-19, y a todo el cuerpo diplomático de Colombia en México, lograr que aparezcan con vida el cantante Bayron Sánchez y su coequipero Jorge Herrera”. Lea también: Primeras pistas de las muertes de B King y Clown: así encontraron sus cuerpos
Claudia Sheinbaum desmiente a Petro tras el asesinato de los artistas colombianos B-King y DJ Regio Clown en México
Durante una rueda de prensa, un día después de que las autoridades mexicanas confirmaran el hallazgo de los cuerpos de los dos artistas —desaparecidos desde el 16 de septiembre—, una periodista le preguntó a Sheinbaum por la supuesta relación con Petro y con el M-19.
“Nunca fui miembro del M-19, no voy a entrar a debate con el presidente Petro”, respondió la mandataria entre risas, zanjando el tema sin más comentarios.
Hallazgo de los cuerpos
La Fiscalía de Ciudad de México informó el 22 de septiembre que los cuerpos de Bayron Sánchez (B-King) y Jorge Herrera (DJ Regio Clown) habían sido encontrados el 17 de septiembre, aunque su identidad se confirmó días después.Según la investigación, los artistas fueron desmembrados, y junto a los restos se halló un mensaje que haría referencia a la organización criminal La Familia Michoacana, una de las más peligrosas del país.
“Llegó la FM, esto va para todos los chapulines, encargados y vendedores, vamos por todo”, decía el texto dejado en el lugar.
Las autoridades mexicanas detallaron que, tras recopilar testimonios y videos de seguridad, la principal hipótesis es que el último paradero de los colombianos fue en el Estado de México, donde habrían sido atacados.
La combinación del brutal crimen con las declaraciones cruzadas entre ambos mandatarios ha generado un intenso debate diplomático y político entre México y Colombia.