Desde comienzos de junio pasado, la popular y misteriosa muñeca Annabelle comenzó a ser movida de El Museo de lo Oculto de los Warren, ubicado en el sótano de su casa en Monroe, Connecticut, estados de Estados Unidos. Desde entonces, han estado ocurriendo sucesos extraños en los sitios que ha visitado.
Los cambios de ubicación de Annabelle se deben a una gira denominaba como Devils on the Run Tour que será en todo el país. Tiene como fin educar sobre fenómenos paranormales y financiar el museo de los Warren, esposos dedicados al estudio paranormal y que ha servido de inspiración para numerosas películas de terror. Lea: El investigador paranormal Dan Rivera muere en gira con la muñeca ‘Annabelle’
La muñeca, considerada uno de los objetos más demoniacos en el mundo, ha viajado en su caja de madera con frente de vidrio, un enorme equipo de trabajo y logística y un sacerdote retirado con conocimientos de exorcismo; sin embargo, en diferentes lugares a donde ha llegado se han presentado hechos extraños.

En Nueva Orleans, poco después de la llegada de Annabelle, se reportó un incendio en la histórica Nottoway Plantation en Louisiana. También se escaparon misteriosamente once reclusos de una cárcel.
Ahora se conoció que el investigador paranormal Dan Rivera falleció repentinamente a los 54 años mientras se encontraba en Gettysburg, Pensilvania, como parte de su gira nacional. La Sociedad de Investigación Psíquica de Nueva Inglaterra, de la cual Rivera era investigador principal, lamentó lo ocurrido. El investigador hacía parte de la dirección de la gira.

Historia de Annabelle, la muñeca poseída por un demonio
La historia real de Annabelle, la muñeca, es la de una muñeca Raggedy Ann que supuestamente fue poseída por un espíritu o demonio. La muñeca fue regalada a una estudiante de enfermería llamada Donna en 1970, quien junto a su compañera de piso, Angie, notaron que la muñeca se movía sola y aparecían mensajes escritos en papel de pergamino.
Asustadas, contactaron a un médium, quien les informó que la muñeca estaba habitada por el espíritu de una niña llamada Annabelle Higgins, que había muerto en el lugar. Sin embargo, los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren determinaron que no era un espíritu, sino una entidad demoníaca que buscaba poseer un ser humano. La muñeca fue llevada al museo ocultista de los Warren y encerrada en una caja especial.