Un grupo de obreros hizo un impresionante hallazgo mientras realizaban trabajos de excavación para ampliar red subterránea de gas en el distrito de Puente Piedra, al norte de Lima (Perú): una momia preincaica que se encontraba a solo 50 centímetros de profundidad.
De acuerdo con el arqueólogo José Aliaga, miembro del equipo de monitoreo de la empresa Cálidda, la momia correspondía a una mujer, quien se encontraba en posición sentada y tenía el cabello castaño oscuro. Su cuerpo fue envuelto en un fardo de sogas hechas con fibra vegetal.
Debido a la riqueza arqueológica del subsuelo de Lima, la empresa, encargada de distribuir gas natural en Lima, suele trabajar con especialistas en esta área.
Momia encontrada en Perú podría pertenecer a sociedad de pescadores
La momia no fue lo único que encontraron los trabajadores durante la excavación; nueve vasijas de cerámica, un plato con restos de crustáceos y una botella decorada con en blanco, negro y rojo.
El director del plan de monitoreo arqueológico de Cálidda, Jesús Bahamonde, ha informado que los elementos encontrados junto a la momia sugieren que la mujer habría formado parte de una sociedad de pescadores del período preincaico, es decir, habría habitado la zona entre los años 1100 y 1470 d.C..
De acuerdo con el diario La Nación, Bahamonde también explicó indicó que estos restos brindan pistas sobre las costumbres alimenticias de las comunidades de esa época.
El arte cerámico y las prácticas rituales que encontraron pertenecen a las culturas que precedieron al Imperio inca.
Momificación natural y ritual en la costa peruana
Gracias al calor y la aridez del desierto costero de Perú, o como resultado de procedimientos culturares, se produce la momificación en esta región, indicó Pieter Van Dalen, docente de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y decano del Colegio de Arqueólogos del Perú.
Las momias, según Van Dalen, suelen aparecer en posición sentada y con las manos cubriendo el rostro, una postura recurrente en entierros ceremoniales.
Por último, el docente señaló que estos hallazgos permiten reconstruir aspectos clave del pensamiento religioso y cómo concebían la muerte en el antiguo Perú.