El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha otorgado 90 días a una comisión especial, liderada por el fiscal general Tarek William Saab, para debatir y elaborar un proyecto definitivo de reforma de la Constitución, vigente desde 1999. Esta medida surge tras su reelección en julio de 2024, un proceso ampliamente cuestionado.
La comisión encargada de este proceso está integrada por altas figuras del chavismo, incluyendo:
Cilia Flores, esposa de Maduro. Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela. Hermann Escarrá, diputado del Parlamento. Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional. Caryslia Rodríguez, presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Elvis Amoroso, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE). Vladimir Padrino López, ministro de Defensa. Lea aquí: Maduro mandó un mensaje a Trump tras deportación de migrantes: esto le dijo
Durante una sesión extraordinaria del Parlamento, Maduro instó a la comisión a realizar un “debate amplio” con distintos sectores del país y presentar una propuesta “bella y perfecta” dentro del plazo estipulado.
Nuevos poderes y penas más severas en la reforma
Maduro señaló que la reforma constitucional incluirá tres grandes temas y una “actualización” conforme a las nuevas realidades del país. Entre los cambios propuestos, destacó la incorporación del “poder comunal” como una cuarta instancia de gobierno, además del poder nacional, regional y municipal.
Asimismo, el mandatario enfatizó que la reforma no tolerará amenazas de carácter fascista o neofascista, y que se establecerán penas “draconianas” para quienes promuevan tales ideologías.

“Al fascismo hay que aplastarlo con las fuerzas de la humanidad, de la democracia, de la verdad”, declaró Maduro, subrayando que la nueva Constitución también buscará consolidar un modelo económico diversificado e independiente.
Una historia de reformas inconclusas
La actual Constitución venezolana, redactada por una Asamblea Constituyente convocada por el fallecido expresidente Hugo Chávez, fue aprobada en diciembre de 1999 con un 71 % de votos a favor, aunque en un proceso marcado por alta abstención y un desastre natural en el norte del país.
En 2017, en medio de una crisis política, el chavismo promovió la elección de una Asamblea Nacional Constituyente (ANC), con la promesa de redactar una nueva Constitución. Sin embargo, esta nunca llegó a materializarse y la ANC terminó asumiendo funciones legislativas, desplazando al Parlamento de mayoría opositora hasta su disolución en diciembre de 2020. Le puede interesar: Venezolanos en EE.UU. frustrados ante cambio de postura de Trump sobre Maduro
