Lo que parecía un día tranquilo de aventura en el mar terminó convirtiéndose en una historia digna de una película. Adrián Simancas, un joven de 24 años, vivió un momento extraordinario cuando una ballena jorobada lo engulló por unos segundos y luego lo expulsó de vuelta al océano. Todo quedó registrado en un impactante video grabado por su padre, Dell Simancas, que rápidamente se volvió viral en redes sociales, dejando a miles de personas en asombro.
El increíble suceso ocurrió en Bahía Águila, en el Estrecho de Magallanes, cerca de Punta Arenas, mientras Adrián y su padre realizaban packrafting, un deporte que combina senderismo con navegación en kayak inflable. La jornada transcurría con normalidad y el mar estaba en calma, pero el destino tenía otros planes. Vea aquí: Video: atropello masivo en Múnich dejó 28 personas heridas
En el video, se ve a Adrián remando tranquilamente cuando, de repente, una enorme ballena jorobada emerge del agua y lo atrapa en su boca en un solo movimiento. Por unos instantes, el joven desaparece dentro del cetáceo, mientras su padre graba el impactante momento sin poder creer lo que está ocurriendo. Antes de que alguien pudiera reaccionar, la ballena escupe a Adrián de vuelta al mar, dejándolo ileso pero completamente desconcertado.
El episodio ocurrió el sábado 8 de febrero a las 3:00 p.m. Dell Simancas, un anestesista venezolano de 49 años, y su hijo Adrián, apasionado por la música y la tecnología, habían iniciado la expedición sin imaginar que vivirían uno de los momentos más sorprendentes de sus vidas.
El video, que ya acumula millones de reproducciones en redes sociales, muestra el instante en que Adrián reaparece en el agua, aturdido pero sano. Su padre rema rápidamente para socorrerlo mientras ambos intentan procesar lo que acaba de suceder.
Las reacciones en redes no se hicieron esperar: “Es lo más impresionante que he visto”, “No sé si envidiarlo o temerle más al océano”, “Este chico puede decir que literalmente salió de la boca de una ballena”.
Expertos en biología marina han explicado que las ballenas jorobadas no atacan a los humanos y que casos como este son extremadamente raros. Lo más probable es que Adrián terminara atrapado accidentalmente en la boca del cetáceo mientras este se alimentaba de un banco de peces. Le puede interesar: Asesinan a veterinario que no logró salvar la vida de una perrita en operación
Tras el asombroso episodio, padre e hijo decidieron suspender su expedición, aunque aseguraron que su amor por la aventura sigue intacto. Eso sí, la próxima vez, tal vez mantendrán una distancia prudente de las gigantescas bocas del océano.