El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó este viernes la suspensión indefinida de toda la ayuda a Sudáfrica, acusando a su gobierno de “confiscar” tierras a la minoría blanca afrikáner y de adoptar posturas contrarias a Israel.
“Mientras Sudáfrica continúe con estas prácticas injustas e inmorales que dañan a nuestra nación, Estados Unidos no proporcionará ayuda o asistencia”, señala la orden ejecutiva firmada por el mandatario republicano. Lea aquí: Juez bloquea acceso de Elon Musk a datos del Tesoro en Estados Unidos
Trump también instruyó la promoción del reasentamiento en EE.UU. de “refugiados afrikáners”, descendientes de colonos neerlandeses, argumentando que huyen de la “discriminación racial” impulsada por su gobierno. Según el presidente, Sudáfrica aprobó una ley para “confiscar tierras agrícolas de la minoría afrikáner sin compensación”, calificándolo como una violación de los derechos de sus ciudadanos.
Además, Trump criticó al gobierno sudafricano por acusar a Israel de genocidio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), calificando su postura como “agresiva” hacia EE.UU. y sus aliados.

A diferencia de la suspensión global de ayuda humanitaria anunciada por Trump por un período de 90 días, la sanción contra Sudáfrica será indefinida. La medida afectará a instituciones como la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID), actualmente en proceso de desmantelamiento bajo la dirección de Elon Musk, aliado de Trump y de origen sudafricano.
Esta decisión se suma a la cancelación de la participación del secretario de Estado, Marco Rubio, en la reunión de ministros de Exteriores del G20, que se celebrará en Sudáfrica.
El gobierno de Cyril Ramaphosa ha sido blanco de críticas desde que promulgó, el pasado 23 de enero, una ley que permite a organismos estatales expropiar tierras por interés público, siempre con una compensación justa. Le puede interesar: ¿Estados Unidos buscará relaciones con Corea del Norte?: Esto dijo Trump
Según el medio City Press, en 2017 los agricultores blancos aún poseían casi el 75% de las tierras agrícolas de Sudáfrica, a pesar de los intentos del gobierno por redistribuirlas en favor de la mayoría negra.
Ramaphosa, por su parte, respondió este jueves asegurando que su país “no se dejará intimidar” por las presiones de Trump y defendió la cooperación internacional y el multilateralismo como principios de su presidencia rotatoria del G20.