Grupos de manifestantes irrumpieron este martes en las calles de Kinsasa, capital de la República Democrática del Congo (RDC), atacando varias embajadas extranjeras en protesta por la situación de conflicto en el este del país, donde el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) ha tomado control de la ciudad de Goma.
Embajadas de Estados Unidos, Francia, Bélgica, Uganda y Ruanda fueron blanco de los manifestantes, quienes quemaron neumáticos frente a sus instalaciones e incluso perpetraron saqueos. Las protestas se enfocaron especialmente en Ruanda, acusada de apoyar al M23, un señalamiento respaldado por la ONU. Lea aquí: Así fue la primer semana de mandato de Trump para los inmigrantes
La jornada comenzó con una movilización general anunciada en redes sociales, que convocaba un “día de la ciudad muerta” como protesta contra la supuesta agresión ruandesa, el respaldo al M23 y el saqueo de recursos de la RDC.
Desde temprano, la emblemática avenida Boulevard Lumumba fue escenario de bloqueos cuando manifestantes exigieron a los conductores colocar ramas en sus vehículos como muestra de solidaridad. Sin embargo, la situación escaló rápidamente.

“Han bloqueado la carretera incendiando neumáticos, y ahora es imposible transitar. Incluso rompieron el parabrisas de un conductor que intentó pasar”, relató un taxista.
El centro de Kinsasa también vivió bloqueos, particularmente en el Bulevar 30 de Junio, que permaneció cerrado durante varias horas. Comercios clausurados y calles vacías marcaron el ambiente de una ciudad usualmente vibrante.
Manifestantes, muchos de ellos portando ramas y cintas rojas, corearon consignas contra Ruanda frente a la sede del partido gobernante, la Unión para la Democracia y el Progreso Social (UDPS). “Goma no caerá. Vamos a vengar a los congoleños que han perdido la vida en esta guerra injusta”, gritó uno de ellos.
Ante la tensión, varios colegios decidieron no abrir sus puertas o enviaron a los estudiantes de vuelta a sus hogares.
Le puede interesar: Palestinos regresan a Gaza: impactantes imágenes
El resurgimiento de las actividades del M23 en noviembre de 2021 ha intensificado la violencia en Kivu del Norte. Desde entonces, el grupo ha avanzado hasta Goma, una ciudad clave de dos millones de habitantes y sede de numerosas ONG e instituciones de la ONU.
El conflicto en el este de la RDC, que se remonta a 1998, ha sido alimentado por la presencia de milicias rebeldes y enfrentamientos con el Ejército, pese a la intervención de la misión de paz de la ONU, Monusco.
