En la primera semana de mandato del presidente republicano Donald Trump, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) reportó la detención de 2.382 inmigrantes indocumentados y la emisión de 1.797 órdenes de captura contra personas susceptibles de ser deportadas, según datos oficiales.
Cifras sin precedentes
Solo el pasado domingo, ICE registró un récord diario con 965 detenciones y 554 órdenes de captura, un reflejo de la nueva política migratoria de mano dura. Desde el 23 de enero, el organismo ha publicado cifras diarias de arrestos y órdenes derivadas de la ofensiva de Trump contra la inmigración irregular. Lea aquí: Donald Trump anuncia drásticas sanciones a Colombia
Las detenciones realizadas bajo esta política, según ICE, indican que “existe una causa probable para creer que la persona arrestada puede ser deportada de los Estados Unidos según la ley federal de inmigración”.
Entre las jornadas más destacadas, el 25 de enero se ejecutaron 286 arrestos y 421 órdenes de detención, mientras que el 24 se registraron 593 arrestos y 449 órdenes, y el 23 sumaron 538 arrestos junto con 373 órdenes de detención.

Medidas extremas en la frontera
Cumpliendo con sus promesas de campaña, Trump ha dado los primeros pasos hacia el endurecimiento de la inmigración. Estas medidas incluyen:
- Aumento de la presencia militar en la frontera con México.
- Suspensión de la admisión de refugiados.
- Autorización de arrestos en lugares previamente protegidos, como escuelas e iglesias.
- Utilización de aviones militares para deportar a migrantes en lo que se proyecta como la mayor deportación masiva en la historia de Estados Unidos.

Tensiones con Colombia
Las políticas de Trump también han generado conflictos diplomáticos. Este domingo, una crisis sin precedentes se desató con Colombia después de que su presidente, Gustavo Petro, rechazara recibir dos aviones de deportación con migrantes colombianos. Le puede interesar: Crisis con EE.UU. deja grietas en la relación entre Petro y Murillo
En respuesta, Trump anunció aranceles del 25 % a Colombia y la revocación de visas para altos funcionarios de ese país. Sin embargo, estas sanciones fueron retiradas la misma noche tras un acuerdo de última hora que permitió reanudar los vuelos de deportación.
Negociaciones con El Salvador
Por otra parte, el gobierno de Trump estaría negociando con El Salvador un acuerdo que permitiría deportar a migrantes de terceros países, incluidos aquellos señalados como miembros de organizaciones criminales, según informó CBS News.
Estas acciones forman parte de un plan más amplio para reformar el sistema migratorio estadounidense, una de las promesas centrales de Trump durante su campaña presidencial. No obstante, estas medidas han provocado un intenso debate tanto dentro como fuera del país, con defensores que aplauden la aplicación estricta de la ley y críticos que denuncian posibles violaciones a los derechos humanos.