El Gobierno de Venezuela anunció este miércoles la detención del excandidato presidencial opositor Enrique Márquez, tras denuncias realizadas por ONG y partidos políticos el día anterior, acusándolo de supuestamente planear un “golpe de Estado” para el próximo 10 de enero, fecha en la que está prevista la toma de posesión presidencial.
El ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello, aseguró que en una computadora incautada a Márquez se encontró un documento de 21 páginas que detallaba un plan para llevar a cabo la juramentación de Edmundo González Urrutia, líder de la mayor coalición opositora y quien asegura haber ganado las elecciones presidenciales de julio pasado, en una embajada venezolana en el extranjero. Lea aquí: Venezuela distribuirá carteles de “se busca” contra expresidentes
Según Cabello, la propuesta de Márquez era realizar la juramentación en una sede diplomática venezolana en el exterior, argumentando que estas representan una “extensión irrenunciable de la soberanía de la república”. Cabello afirmó que las sedes en Estados Unidos y Perú, países con los que Caracas no tiene relaciones diplomáticas, fueron ocupadas por los Gobiernos de estas naciones.
Como el caballero (González Urrutia) no puede venir para acá, o no quiere venir para acá, se van a reunir cinco delincuentes en la sede de una embajada del extranjero”.
Diosdado Cabello (Ministro del Interior y Justicia)

Cabello también calificó a Márquez como parte de un intento de golpe de Estado en Venezuela. “El que estaba al frente de eso se llama Enrique Márquez. Aquí no hay ángeles, y menos entre los opositores”, sentenció.
El ministro respondió a críticas emitidas por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien, a través de un mensaje en X (anteriormente Twitter), condenó la detención de Márquez, calificándolo como su “amigo” y exigiendo la libertad de todos los presos políticos en Venezuela. Le puede interesar: María Corina Machado convoca masiva protesta antes de la investidura
Cabello además vinculó a Márquez con un funcionario del FBI, quien, según las autoridades, fue detenido el martes en Venezuela junto con otros seis extranjeros, entre ellos un militar estadounidense, dos colombianos y tres ucranianos, a los que el Gobierno de Maduro acusa de ser “mercenarios”.

Sonia Lugo, esposa de Márquez, denunció que su esposo fue arrestado el martes por la mañana por “grupos parapoliciales” que actuaron con fuerza para “callar e intimidar” a quienes buscan un cambio en el país.
Enrique Márquez, quien ha sido exvicepresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) y exdiputado, se había manifestado en numerosas ocasiones en contra de los resultados electorales de julio, exigiendo la publicación de las actas de votación. Márquez también rechazó el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que avaló la reelección de Nicolás Maduro, al considerar que no se presentaron pruebas transparentes ni un desglose de los resultados, como lo exige el propio cronograma electoral.